Al menos 47 panistas acusaron ante el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) que Eduardo Rivera Pérez está recurriendo al chantaje y la manipulación para poner obstáculos a la inclusión de cara a la definición del candidato a la presidencia municipal de Puebla.
Exfuncionarios, diputados y exdiputados locales y federales, entre los que destacan Jorge Aguilar Chedraui, Verónica Sobrado Rodríguez, Mónica Rodríguez Della Vecchia, Carolina Beauregard Martínez, Marcelo García Almaguer, Blanca Jiménez Castillo, Francisco Rodríguez Álvarez, Oswaldo Jiménez López, Pablo Rodríguez Regordosa, Jacobo Ordaz Moreno y el exdirigente estatal Jesús Giles Carmona, enviaron una carta al dirigente nacional Marko Cortés Mendoza para señalar que las condiciones políticas del país y del estado de cara a la elección del 6 de junio hacen un fuerte llamado a la unidad.
Aunque el documento no menciona explícitamente a Eduardo Rivera Pérez, el texto infiere que es quien está recurriendo al chantaje y la manipulación para poner todo tipo de obstáculos al esfuerzo de inclusión, además que su amenaza de competir abanderado por un partido distinto no es más que una prueba fehaciente de su falta de compromiso, su deslealtad a la causa y su desprecio por los ideales del Partido Acción Nacional.
Los firmantes recordaron que se ha conformado la coalición “Va por México” entre el PAN, PRI y PRD, en la que todos los partidos que la integran han cedido parte de sus intereses a favor del interés colectivo, además que hay múltiples liderazgos que tienen la capacidad, la preparación y son electoralmente competitivos para encabezar la planilla que competirá por el ayuntamiento de Puebla, cargo al que aspiran legítimamente.
“Si en el contexto nacional los diversos partidos han hecho patente la generosidad y el propósito colectivo de salvar a México a través de la mutua inclusión y la construcción de acuerdos, la misma regla ha de regirnos en casa”, indicaron.
Señalaron que de entre los aspirantes al cargo de presidente municipal de Puebla, la selección debe obedecer al compromiso de sumar a todos en el proceso electoral y en el futuro gobierno, no únicamente al posicionamiento en encuestas.
Advirtieron que la ruta de la división y la derrota inician con la exclusión y la cerrazón, de modo que para las elecciones del próximo 6 de junio, la inclusión, el diálogo sereno y el acuerdo que favorece la unidad serán las armas más eficaces para obtener el triunfo.