Baja es la afluencia en varios de los panteones de los municipios de Cuautlancingo, San Andrés y San Pedro Cholula, en el marco de este Día de Muertos.
En un recorrido realizado por El Sol de Puebla, se observó que, a diferencia de años pasados, los pasillos de estos recintos no lucen abarrotados.
En el panteón municipal de San Andrés, desde el pasado fin de semana, lució con pocos visitantes.
Con flores en mano o en cubetas, fue como llegaban los creyentes de esta tradición anual, cuyo día principal es el 2 de noviembre.
“Vengo a visitar a mi hijo, que se nos adelantó desde hace 10 años (…) fue en accidente”, externó María Dolores, habitante de la cabecera local.
Mientras que, en el panteón del barrio de Jesús, perteneciente al territorio de la jurisdicción de San Pedro Cholula, integrantes de la familia Peralta, detallaron que el año pasado, por la pandemia, sólo uno de ellos, visitó la tumba de su familiar.
No obstante, en este noviembre, decidieron unirse para arribar a este espacio público para cumplir con el deber de colocar flores al sitio que alberga los restos de Pedro, quien en vida les alegró muchos momentos de convivencia.
En Cuautlancingo, otro municipio de la zona conurbada de Puebla, también se notó una baja afluencia de visitantes.
“Estamos recibiendo a la gente, tenemos nuestras fuentes llenas, tenemos agua suficiente para las necesidades y la única disposición es el uso de cubreboca, sana distancia, no bebidas alcohólicas y además se está sanitizando a la población, y el horario es de 7 de la mañana a las 7 de la noche”, externó la directora del Panteón Municipal de Cuautlancingo, Luz María Martínez Pérez.
Añadió que hasta ayer, la afluencia de visitantes era del 65 por ciento y se espera que, en este día, incremente.
Es importante puntualizar que, en los panteones municipales, autoridades exhortan a los asistentes apegarse a las medidas sanitarias.
También fueron mesuradas en el tema de autorización de puestos informales a las afueras de estos recintos, puyes en ninguno aprobaron la venta de bebidas embriagantes, solo de aquellos dedicados a la venta de antojitos mexicanos.