A 50 días de iniciada la prueba piloto, en Puebla hay resistencia para que los patrones afilien a las empleadas domésticas al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), reveló el Sindicato Nacional de Trabajadores y Trabajadoras del Hogar (Sinactraho), principalmente, por los bajos sueldos que se les proporcionan. Al momento, van, por lo menos, 3 personas contabilizadas en dicho esquema.
La secretaria general colegiada del sindicato, Marilú Padua, explicó que, en el estado poblano hay un grupo de coordinación, así como un grupo de promoción, que se dedicará a hacer juntas para informar a trabajadoras y trabajadores del hogar acerca de sus derechos y del programa piloto para que se afilien al seguro social.
De manera general, en México, el sindicato ha detectado una respuesta positiva referente a las afiliaciones de empleados del hogar, aunque en los estados como Puebla, que se caracterizan por tener una mayoría de puestos de trabajo en el sector informal (72 por ciento a decir del Inegi), existe una mayor resistencia para que los patrones incorporen a este sector al IMSS, describió la entrevistada.
La experta añadió que, de las 3 personas afiliadas de Puebla, una labora con una docente y otras 2 con comerciantes. Para hacer el trámite, se les apoyó con asesoría, aunque los pasos son sencillos –explicó Padua-.
En el país, dijo, se han hecho unos 3 mil registros de trabajadoras (es) del hogar ante el IMSS. Se ignora cuántas son en total de Puebla, debido a que hay veda electoral y la institución ha aclarado que no puede emitir esta información.
SALARIOS, DE LOS MÁS BAJOS DEL PAÍS
Además de la resistencia a la afiliación, otra barrera para que las (los) empleadas (os) del hogar de Puebla tengan seguridad son los bajos sueldos, pues ganan desde 2 mil 100 pesos mensuales (70 pesos diarios) hasta 4 mil 500 pesos (150 pesos diarios), y teniendo como base ese salario, el patrón no estará dispuesto a desembolsar cuotas mensuales al IMSS, desde los 904.22 pesos o hasta los 9 mil 317.91 pesos, que son los tabuladores del programa piloto.
Esto, en contraste con el salario que el sindicato propone, que es de 350 pesos por una jornada de 8 horas con actividades básicas, lo que pone al salario máximo de Puebla –para este sector- un 133 por ciento por debajo de lo esperado. A nivel nacional, se tiene planeado que haya un salario mínimo profesional para este gremio, con aval de la Comisión Nacional de Salarios Mínimos.
Es importante mencionar que en Puebla hay una situación muy complicada, ya que los salarios van entre los 70 pesos, y lo que gana como máximo una compañera es de 150 pesos por jornadas de más de 8 horas.
Añadió que tener horario de entradas y de salidas, así como claridad –en papel- en las actividades que harán los empleados y empleadas domésticas, dignificará la labor y facilitará las relaciones laborales. Incluso, ayudará a ambas partes para establecer las obligaciones y los derechos.
Ahora que el IMSS tiene un programa piloto para la afiliación de este personal, solo hay un pago neto de la cuota patronal, sin pago de impuestos. Esto será vigente solo durante 1.5 años, mientras hay una legislación en la materia.
Hay que recordar que, el IMSS estableció un salario mínimo para el programa piloto, que es de 3 mil 080.40 pesos mensuales, que implicaría 102.68 pesos diarios. Con esta percepción económica, un patrón debería aportar 904.22 pesos al instituto.