Con menos cosas que ofrecer a los difuntos que regresan para visitar a sus seres queridos en el Día de Muertos, las ofrendas que los poblanos colocarán en sus casas este año serán más pequeñas que las de años anteriores debido a que la pandemia del Covid-19 dejó como saldo la pérdida de empleos.
El año pasado, la señora Meryva gastó alrededor de 2 mil pesos para la ofrenda que tradicionalmente se coloca en su casa; sin embargo, la contingencia sanitaria no permitió que este año pudiera gastar más de 500 pesos en su ofrenda.
Lamentó que sus familiares perdieran el empleo por el cierre de negocios, pues sus difuntos no podrán gozar de lo que normalmente recibían al visitarlos en su hogar. Además, expresó que el cierre de los panteones en la capital fue un “golpe duro” para la familia ya que no podrán acompañar a sus seres queridos fallecidos.
Por otra parte, la señora Elia García se compadeció al saber que no podrá comprar todo lo necesario para colocar la ofrenda a sus difuntos, ya que las cosas se encarecieron respecto al año pasado. “Ya no sabemos cuánto vamos a gastar ahorita, porque sí se gasta; tenemos que hacerle su comidita; un poco de mole, aunque sea”, dice Elia García en entrevista con El Sol de Puebla.
Doña Elia resintió que este año no podrán ir al panteón, ya que su ofrenda será más pequeña y no podrán visitar a sus familiares difuntos. “Para el panteón no vamos a poder ir, a ver qué día vamos. Ya estamos acostumbrados a llevarle sus flores cada año”.
Lo mismo ocurrió en la ofrenda que el señor Juan Mauricio colocará en su casa, pues a pesar de que siempre se hace una pequeña, antes gastaba alrededor de 500 pesos para sus difuntos, mientras que este 2020 no planea gastar más de 250 pesos.
Juan Mauricio hace las compras de pequeñas piezas de papel picado, calaveras de azúcar y hojaldras, esperando que sea suficiente para que sus fieles difuntos regresen a visitar a su familia, aunque protesta porque él no podrá comer con sus seres queridos en el panteón como cada año.
Angela Castillo recuerda que en años anteriores gastaba casi 150 pesos sólo en papel picado para su ofrenda de Día de Muertos, pero este año sólo le alcanzó para comprar 20 pesos del tradicional papel de colores.
Por su parte, la señora Lupita espera que los cien pesos que gastará en veladoras sean suficiente para “guiar el camino” de sus seres queridos de vuelta a casa, pues el año pasado sus difuntos tuvieron casi 20 velas que la señora Lupita compró con 350 pesos.
María Guadalupe expresó que este año velarán a sus familiares desde su casa debido a que el decreto del cierre de panteones les prohibirá estar con sus seres queridos; comentó que harán el esfuerzo para que la ofrenda de este año sea la misma que las anteriores, con lo que espera poder complacer a sus difuntos nieto y hermana.
Este 2 de noviembre, los fieles difuntos en Puebla recibirán una ofrenda con menos adornos y comida, al igual que los panteones se verán vacíos; sin embargo, los poblanos guardarán la tradición familiar desde sus casas para deleitar los paladares de sus seres queridos y tratar de recibirlos como cada año.