El matrimonio entre personas del mismo sexo debe ser reconocidopor la Iglesia Católica, pidió la monja y activista española,Teresa Forcades i Vila.
La Iglesia Católica vive, argumentó ayer en el marco de laconferencia Desafíos para construir el buen vivir y restaurar eltejido social que impartió en la Universidad IberoamericanaPuebla, una “posición insostenible” al reprobar los actos perono los pensamientos de los homosexuales.
“Ha habido una evolución, ha habido un cambio, hoy en día laIglesia Católica no considera el deseo homosexual como intrínsecamente desordenado, pecaminoso, contrario a la voluntadde Dios pero sí considera el acto homosexual, realizar este deseocomo algo contrario a la voluntad de Dios”, explicó. “Yo creoque esta es una relación insostenible (…)”.
Reconocer el amor entre dos hombres o dos mujeres no equivale,advirtió, a “bajar el listón” en la perspectiva religiosadesde la que se analiza el acto sexual. “-La relación sexual-nos da la capacidad de construir un futuro con esta persona”,recordó. “La iglesia, como Iglesia, debe dar esa visibilización–a través del sacramento del matrimonio- en el espacio y eltiempo de esa realidad que es el amor y la libertad anteDios”.
“Lo sagrado y lo santo” en una relación de pareja respondeal compromiso sin utilidad, como sería, por ejemplo, el únicoobjeto de tener descendencia. “Es una maravilla tener hijos pero¿es lo santo y lo sagrado el tener hijos? Si lo fuera, ¿por quéla Iglesia Católica permite hasta el día de hoy que se casenmujeres post menopáusicas?”, se preguntó.
Más allá de su reconocimiento legal, debe ser la IglesiaCatólica, insistió la también teóloga, la institución que abrasus puertas a los enlaces igualitarios. “Yo desearía que en laIglesia Católica existiera el matrimonio sacramental para launión homosexual”, pidió.
ABORTO, UN “MALMENOR”
La monja exigió además la despenalización del aborto. Lainterrupción voluntaria del embarazo, aunque no es deseable,representa, añadió, un “mal menor” en comparación con losagravios al principio de autodeterminación de la mujer.
“(…) Es incompatible considerar el aborto como algo deseabley positivo pero yo creo que no es incompatible con la visión derespeto profundo por la vida considerar un mal menor que el Estadono castigue a las mujeres que decidan abortar“, alegó.