Las y los próximos representantes de cargos de poder deberán de fortalecer las políticas y programas dirigidos a la protección de infantes y adolescentes en Puebla, así como garantizar el acceso equitativo a servicios de atención, coincidieron integrantes de la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim) y Fundación Juconi.
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Al presentar el informe “La Infancia Cuenta Puebla 2024”, exhibieron que la entidad poblana ocupa el cuatro lugar nacional con mayor población de niñas, niños y adolescentes, con 2 millones 148 mil 335 personas de entre 0 y 17 años, equivalente a 32.6 por ciento de la población total, según el informe más actualizado del Inegi, por lo que se debe de trabajar en favor de esta población.
Durante la intervención de Tania Ramírez Hernández, directora ejecutiva de Redim, expuso que, si bien en los últimos años las autoridades en la entidad han trabajado en favor de este sector de la población, aún existen pendientes que deben atenderse.
En este sentido, señaló que las autoridades electas tendrán en sus manos la facultad de mejorar las condiciones de vida de este sector poblacional, con la finalidad de garantizarles un una vida libre de violencia y con acceso a los servicios básicos para un desarrollo íntegro.
Ramírez Hernández expuso que en 2022 se registró que 62.8 por ciento de la población de 0 a 17 años en Puebla vivía en situación de pobreza en 2022, es decir 1.4 millones de niñas, niños y adolescentes.
Ante esto, la entidad poblana ocupó el cuarto lugar a nivel país con mayor porcentaje de población infantil y adolescente en situación de pobreza en dicho año, de acuerdo con estimaciones del Coneval.
De igual manera, el 24.2 por ciento de la población de 0 a 17 años presentaba carencia por acceso a la alimentación nutritiva y de calidad en el mismo año; lo que significó 523.1 mil niñas, niños y adolescentes.
Además de que el 51 por ciento de personas de las edades previamente mencionadas presentaba carencia por acceso a los servicios de salud en 2022; equivalente a 1.1 millones de niñas, niños y adolescentes.
Por ello, la entidad poblana ocupó el séptimo lugar nacional con mayor porcentaje de la población infantil y adolescente con carencia por acceso a los servicios de salud en 2022, según el estudio de Medición de la pobreza del Coneval.
Ante este panorama, la representante de dicha organización expuso que la tarea de los nuevos políticos es crear elementos de política pública para proteger y respetar los derechos de los infantes y adolescentes.
Entre las propuestas planteó establecer políticas y programas dirigidos a mejorar el acceso a la salud y alimentación enfocados en la desigualdad que perpetua la inseguridad alimentaria y la falta de acceso a servicios de salud.
Así como la designación de presupuesto suficientes para el sector, salud, salud, así como el establecimiento de acciones para garantizar el acceso a este derecho para todos.