Alrededor de 30 personas, provenientes de Santa Rita Tlahuapan, se manifestaron por un poco más de cinco horas en la Curia Arzobispal de Puebla para exigir el regreso del sacerdote Odilón Franco Sánchez a su parroquia, luego de que fuera removido a otra comunidad el pasado mes de mayo.
Tras el cambio del párroco a la comunidad de Cuautinchán empezó a sufrir diversas irregularidades en la zona, así como presuntos tratos déspotas por parte de los habitantes del lugar, acusaron los inconformes.
En entrevista con El Sol de Puebla, María Luisa, una de las quejosas, explicó que tras su cambio, uno de los habitantes de Santa Rita acudió a visitarlo, y fue cuando se dio cuenta de las supuestas malas condiciones en las que vive, por lo que alertó a los demás creyentes.
“Estamos aquí por una obligación moral, no tenemos nada en contra del nuevo sacerdote, no estamos pidiendo tampoco que lo quiten, estamos aquí porque queremos asegurarnos de que el padre Odilón sea removido a un lugar donde esté seguro”, solicitó.
La inconforme afirmó que, durante los cuatro años que estuvo el sacerdote el frente de la parroquia de Santa Rita, se desempeñó de forma excelente, por lo que desconocen los motivos de su cambio.
Por lo anterior, los habitantes arribaron a la sede religiosa al filo de las 11:00 horas, pues aseguran que agendaron una cita con las autoridades de la Curia, sin embargo, no fueron recibidos.
Horas más tarde, los inconformes decidieron colocar carteles en este lugar y bloquearon los accesos de la misma para exigir que sus exigencias fueran cumplidas.
“Padre no está solo, Tlahuapan está con usted, ánimo”, “Exigimos una respuesta positiva, para que le quiten el castigo al padre Odilón”, fueron algunas consignas de los manifestantes.
Hasta el momento, la Arquidiócesis de Puebla no ha emitido su postura respecto a la inconformidad de los pobladores, así como las medidas que se llevarán a cabo respecto a su solicitud.