El poblano José Alfredo Lorenzo Cruz se convirtió en el segundo lugar del concurso “Descoloniza tu comida”, el cual da a conocer el trabajo de comunidades alrededor del mundo para defender sus territorios, su herencia y cultura gastronómicas. Él participó con la quesadilla fina del municipio de Tlaola.
De acuerdo con su página oficial, Slow Food es una organización global que se fundó en 1989 para prevenir la desaparición de culturas y tradiciones alimentarias locales. También busca contrarrestar el auge de los ritmos de vida acelerados y combatir el desinterés sobre los alimentos que se consumen.
Slow Food se ha convertido en un movimiento mundial que hoy involucra a millones de personas en más de 160 países que trabajan para asegurar que todo el mundo tenga acceso a una alimentación buena, limpia y justa.
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Este grupo, considera que la alimentación está relacionada con muchos otros aspectos de la vida, incluidos la cultura, la política, la agricultura y el medio ambiente. Fue por ello, que lanzaron la convocatoria “Descoloniza tu comida”, la cual tenía como meta, proteger los alimentos de los pueblos indígenas de la extinción.
En el concurso se pidió a todos los interesados que dieran a conocer una receta, así como sus orígenes indígenas de alimentos y fue así como ganó el segundo lugar el poblano José Alfredo Lorenzo Cruz, pues presentó la quesadilla de queso fino, la cual está en peligro de extinción.
José Alfredo tiene 29 años y estudió gastronomía en la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), pero si logró entrar a esta institución fue gracias al programa “Una Apuesta de Futuro”, que brinda una beca del 100 por ciento a jóvenes de comunidades rurales que no tienen acceso a una educación superior.
No es la típica quesadilla que conocemos en Puebla, es un pan tradicional de la región a base masa blanca enriquecida con manteca de cerdo, azúcar o piloncillo. Anteriormente, se utilizaba levadura de papa y queda en forma de media luna como una empanda y de adorno lleva una flor o figuras hechas con la misma masa.
Para las personas de su pueblo, esta quesadilla era una forma “elegante” de recibir a sus invitados, pero también se elaboraba en ocasiones especiales, por ejemplo, si una persona llegaba a ocupar un puesto político, regalo para mayordomos religiosos, seres queridos, cumpleañeros y hasta pedidas de mano para una boda. En la actualidad, se coloca en los altares de Día de Muertos.
“Nos emociona compartir con ustedes a las personas ganadoras del concurso “Descoloniza tu Comida”. Gracias por todo el trabajo que realizan en la protección, defensa y fortalecimiento de los sistemas alimentarios de los pueblos indígenas”, publicó el grupo y dio a conocer lo siguiente:
El primer lugar se lo llevó el dulce de Zimatl, que fue postulado por Guadalupe Tzopitl Montalvo, una joven nawa del estado de Veracruz. Mientras que para el segundo lugar hubo dos puestos con las palomitas de maíz mexicanas, postuladas por Alma Lili Cárdenas Marcelo, mazahua del Estado de México y la quesadilla fina de queso por José Alfredo Lorenzo Cruz, nahua de Puebla.
“Al defender nuestros alimentos, defendemos nuestra identidad, nuestro orgullo, nuestra cultura, sigamos trabajando y sumando desde nuestros espacios. Agradecemos a todos los participantes que hicieron posible este concurso. Recuerda, la revolución comienza en tu plato. ¡No hay comida sin pueblo/cultura!”, concluyeron.