En el estado de Puebla hay un millón 600 mil personas con pobreza alimentaria, es decir, que no cuentan con los recursos suficientes para comer de manera digna, ya que tienen solo un ingreso promedio de 2 mil 287.66 pesos mensuales, mientras que la canasta básica asciende a los 2 mil 606.27 pesos, de acuerdo con información del Banco de Alimentos Cáritas Puebla.
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En entrevista con El Sol de Puebla, José Miguel Rojas Vértiz Bermúdez, director general de la organización, indicó que dicha cifra representa al 43.9 por ciento del total de la Población Económicamente Activa (PEA), que suman 2 millones 965 mil 064.
Los municipios que tienen la mayor concentración de este sector vulnerable son Puebla, San Pedro Cholula, San Andrés Cholula, Atlixco, San Martín Texmelucan, Tehuacán y Teziutlán, donde la carencia alcanza los niveles extremos.
Toda esta gente no puede acceder a una despensa completa y balanceada, por lo que solo medio se alimentan, pues deben ahorrar para pagar otros gastos básicos, como la vivienda, vestido y transporte explicó.
Desde su perspectiva, el problema está más focalizado en zonas urbanas, ya que en las rurales hay una mayor autosustentabilidad, es decir, que ahí pueden generar sus propios alimentos.
Una de las cifras más bajas
Para complementar dicha información, esta casa editorial indagó en los indicadores del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) con corte al primer trimestre de 2024.
En ellos, se expone que el dato dado a conocer por el Banco de Alimentos (43.9 por ciento), es el quinto más bajo de los últimos 19 años, es decir, desde el 2005, cuando se inició con el registro de información.
Los otros cuatro periodos donde se ha reportado a la menor cantidad de personas en pobreza alimentaria son el tercer trimestre de 2023, con un 42.7 por ciento; primer trimestre de 2020, con un 42.9 por ciento; cuarto trimestre de 2023, con un 43.3 por ciento, y el tercer trimestre de 2019, con un 43.7 por ciento.
A pesar de esto, el Coneval refiere que con el dato actual, la entidad poblana se ubica en la posición número nueve, como uno de los lugares de la República Mexicana con más habitantes en esta condición.
Solo se encuentra por debajo de Chiapas, con un 63.6 por ciento; Oaxaca, con un 59.7 por ciento; Guerrero, con un 54.9 por ciento; Zacatecas, con un 48.3 por ciento; Hidalgo, con un 47.6 por ciento; Veracruz, con un 46.1 por ciento; Morelos, con un 46.0 por ciento, y Tlaxcala, con un 45.1 por ciento.
En los registros del consejo, se informa que la gente con pobreza alimentaria, también sufren de otro tipo de carencias sociales, como son la falta de servicios de salud, seguridad social, vivienda de calidad y de servicios básicos, como son energía eléctrica, agua potable y drenaje, por mencionar algunos.
Falta de crecimiento económico, uno de los motivos
Ante esta serie de indicadores, Juan Alberto Vázquez Muñoz, profesor de la facultad de Economía de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), dijo que uno de los motivos de la pobreza alimentaria, es el poco crecimiento económico que tiene el estado, lo que limita la creación de nuevas empresas formales y más empleos de calidad.
Desde su óptica, el poco desarrollo que tiene el estado se debe a la falta de estímulos para atraer nuevas inversiones, ya sean extranjeras o domésticas (locales).
Considero que las inversiones se encuentran estancadas de manera histórica en nuestro territorio, pues llegan pocas, y esas, en muchas ocasiones no impactan en el empleo ni en el aparato productivo (…) Los responsables, justamente son las autoridades, ya que no generan las condiciones que necesitan los inversionistas para aterrizar su capital con nosotros ahondó.
Otro motivo es la desigualdad económica que se tiene de manera interna en toda la República Mexicana, es decir, en unos estados los ingresos son mejores que en otros, lo que pone en vulnerabilidad y desventaja a los propios mexicanos.
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“Esto pasa en todo el país y Puebla no está exento de esto. Vemos que en los estados del norte a la gente, aunque esté en pobreza, le va mucho mejor que a los del centro o el sur (…) Quiero aclarar que este indicador ha mejorado con el paso del tiempo, pero no funcionará siempre la dinámica de quitarle a unos para darle a otros”, concluyó.