Motivados por la fe, el arraigo cultural y el fervor religioso, decenas de familias se congregaron en la junta auxiliar de San Felipe Hueyotlipan para presenciar la interpretación de la Pasión de Cristo, que se realiza en ese lugar desde hace más de 150 años. Acuden con la intención de mantener vigente una tradición que, aseguran algunos, se desvanece ante el desinterés de las personas más jóvenes.
Bajo las incesantes altas temperaturas, este viernes se llevó a cabo, desde tempranas horas, la centenaria representación religiosa que proyecta la muerte de Jesucristo.
De forma paralela, la tradicional venta de botanas, antojitos, aguas frescas y recuerdos, habitantes de ese lugar y otras partes de la entidad reunió a cientos de personas en las inmediaciones de la presidencia auxiliar.
Para muchas personas, mantener a flote la tradición frente a la pandemia de Covid-19 ha sido un reto monumental, especialmente debido a que se agudizó fue la reducción de asistentes y participantes en las actividades culturales.
Por ejemplo, en 2023 destacó, según el artesano Leobardo Romero, que menos tapetes decorativos fueron colocados sobre las calles de San Felipe Hueyotlipan.
Romero nació y se crió en esa junta auxiliar. Hoy, a sus 52 años de edad, mantiene una tradición centenaria en su familia, la de colocar tapetes sobre las calles de la demarcación, por los cuales atraviesa el elenco que enarbola la representación de la muerte de Jesucristo a manos de los romanos.
Estas representaciones artísticas, hechas con arena y aserrín, son una expresión cultural inherente de las fiestas de Pascua. Aunque su implementación no está contenida en los pasajes bíblicos, su existencia representa la fe y el agradecimiento de los creyentes católicos.
La preparación para Leobardo empezó hace aproximadamente dos semanas, pues tuvo que realizar los bocetos, conformar los moldes, y adquirir la arena y pintarla . En Viernes Santo la espera llegó a su fin. El momento de demostrar su gratitud por los milagros concedidos se manifiesta en una obra pintada en la calle.
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Para Leobardo no representa cansancio madrugar o pasar varias horas bajo el sol, pues su convicción y orgullo es mayor que cualquier obligación. Actualmente, sin embargo, teme que la tradición de los tapetes tenga sus días contados.
Al menos en su cuadra, confiesa, ha disminuido entre 30 y 40 por ciento la colocación de tapetes. Aunque esto se debe principalmente a la llegada de personas ajenas a la junta auxiliar, desinteresadas en la preservación de esta tradición, otros factores, como el desinterés de las personas más jóvenes.
Otras actividades, sin embargo, en las que los jóvenes sí tienen mayor participación es en las teatrales, por ejemplo.
Osvaldo Coyotl Soriano, estudiante de Relaciones Internacionales con 25 años de edad, fue el encargado de representar, por segundo año consecutivo, a Jesucristo en la representación de Pascua, esto a través de la Organización Teatral de San Felipe Hueyotlipan.
Su edad lo llevó a convertirse en el actor más joven en representar a ese personaje, en los más de 150 años en los que se realiza dicha obra en ese lugar.
Desde su perspectiva, es necesario que las juventudes refuercen su fe y la materialicen en alguna pasión, independientemente de si es algo religioso o no. No obstante, expone que la religión católica lo ha llevado a consolidar su fe.
Disminuyen ventas
Análogamente, quienes también enfrentaron varios obstáculos debido a la reducción de la participación social fueron los comerciantes, quienes tuvieron que detener su venta durante 2020 y 2021. Aunque el año pasado se reinició la celebración presencial, muchos vendedores no se han recuperado económicamente y, al contrario, han generado menores utilidades que otros años.
Tal fue el caso de la señora Eugenia Brenis, quien ha vendido alimentos, como quesadillas y tacos, desde hace un lustro. Angustiada, comenta que en los dos días de ventas ha logrado vender muy poco, esto en comparación con lo que ocurría antes de la pandemia, asegura.
Por si ello fuera poco, indica que casi el 100 por ciento de los insumos que utiliza para trabajar se encarecieron, especialmente los alimentos cárnicos y vegetales.
Por su parte, la señora Elizabeth Bazán, propietaria de un pequeño puesto de botanas, refiere que la poca afluencia de clientes la hará evaluar si el próximo año es o no viable mantener su negocio, pues señala que la utilidad es más bien negativa. Por ejemplo, de 10 de la mañana hasta la 1 de la tarde, no había vendido nada. Después tuvo algunas ventas, pero fueron insuficientes.
Finalmente, cabe mencionar que, en un sondeo realizado por esta casa editorial, destacó que un gran número de personas ha reducido la utilización de medidas de protección frente al Covid-19. No obstante, autoridades auxiliares repartieron cubrebocas y aplicaron gel antibacterial a las personas que así lo quisieran.