Puebla se ubica a más de 720 kilómetros de Estados Unidos,pero sin importar la distancia, lo que pase en aquel país durantesu elección el próximo 8 de noviembre impactará en la entidad,debido a que dicha nación influye en la inversión extranjera, lasremesas y la recepción de migrantes. Académicos del estadodijeron que no se debe pronosticar un escenario fatalista pero queen caso de que el republicano Donald Trump sea electo, síendurecerán las deportaciones hacia territorio local, crecerá eldesempleo y posiblemente la delincuencia, y podría haber menosintercambios educativos.
José Luis García Aguilar (de la Universidad Iberoamericana),Daniel Ramírez Ortiz (de la Upaep) y Verónica Reyes Barón (delItesm), refirieron que Trump podría aumentar la políticaantiinmigrante, factor para el que no están preparadas lasautoridades locales, pues no hay empleos para ofrecerles, y tampocoescuelas especializadas (en formación inglés-español) quereciban a los niños y jóvenes.
García dijo que el retorno de migrantes puede provocar másviolencia y pobreza (debido al desempleo), aunque agregó que lacrisis humanitaria no solo sería en la entidad o el país, sino entodas las naciones donde prolifera la migración hacia EstadosUnidos, puesto que autoridades nacionales carecen de una políticapreventiva.
Reyes agregó que un factor de riesgo si gana Trump es que–por la incertidumbre de inversionistas- podría dispararse elcosto del dólar, lo que aumentaría precios de algunos productos yservicios; esto durante el primer trimestre de su mandato.
Ramírez señaló que se endurecería el discurso de odio hacialos migrantes, lo que no es positivo. Por consecuencia aumentaríala persecución y discriminación hacia los mexicanos en ESTADOSUNIDOS .
PODRÍAN QUEDAR PROPUESTAS SOLO ENDISCURSO
Este martes se llevarán a cabo las elecciones presidenciales enEstados Unidos, que cerrarán el período de Barack Obama yabrirán una etapa política-económica-social en el paísvecino.
Durante su campaña, Trump hizo varias propuestas que podríanafectar a los mexicanos, entre las que destacan la construcción deun muro de 1,600 kilómetros que separe a ambos países e inhiba lamigración ilegal (construcción que pagaría México), bloquear elenvío de remesas, aumentar costo de las visas, deportar a 5.6millones de mexicanos, aumentar 45 por ciento aranceles a productosmexicanos (y chinos), modificar el Acuerdo Transpacífico deCooperación Económica (TPP) y castigar a las empresas queinviertan en otras partes que no sean Estados Unidos.
Aunque los académicos de Puebla dijeron que hay riesgoslatentes, señalaron que la mayoría de sus propuestas quedaríansolo en el discurso político debido a que éstas tendrían que seravaladas por los congresistas, que representan un contrapeso parala figura presidencial.
García Aguilar apuntó que en caso de ganar Trump, “no seríael fin de la historia” pues de inicio hay equilibro de poderes enEU, además de muchos intereses de empresarios que tienen suscapitales inyectados en otras naciones como México.
El académico dijo que aunque la República Mexicana es débilante el poderoso país norteamericano, existe una mutua necesidad,por la fuerza de trabajo. Además, recordó que están vigentestratados comerciales que no pueden disolverse por la voluntad deuna persona, sino que están involucrados varios países.
Refirió que Trump busca que crear un “castillo aislado”pero por más que se esfuerce, no se puede detener la relaciónvecinal que por tantos años ha perdurado, sobre todo porqueciudades como Nueva York se han formado por inmigrantes de todo elmundo.
VIABLE LA DEPORTACIÓN PERO NOMASIVA
Desde el inicio de su campaña, Trump se caracterizó por undiscurso contra los latinos que viven en EU. Especialmente hareferido que los mexicanos son criminales y violadores, así comooportunistas que restan puestos laborales a sus compatriotas.
Derzu Daniel Ramírez, catedrático de la Facultad de RelacionesInternacionales de la Upaep, opinó que no se debe sobredimensionaral candidato Trump, pues en caso del triunfo, no tendría losmedios para cumplir sus propuestas.
En el tema de migración, el profesor reflexionó que setendría que contar con una cantidad importante de policías parahacer deportaciones masivas, a la par de que Estados Unidosasumiría algunas dificultades para cubrir las vacantes quedejarían los migrantes.
Habrá que recordar que diversos testimonios de migrantes–sobre todo ilegales- han señalado que el campo laboral selimita a trabajos que los norteamericanos no desean hacer, comojardinería, plomería, ayudantes de cocina, herrería,albañilería, en agricultura, entre otros con bajos sueldos.
En el mismo sentido, Verónica Reyes, directora de la carrera deRelaciones Internacionales del Itesm, opinó que haría falta unagran logística (transporte, alimentos, detenciones) para deportara los migrantes que viven en los diferentes estados de la UniónAmericana, por lo que sería difícil concretar el hecho de formamasiva.
¿AFECTARÍA LAINDUSTRIA?
Huberto Juárez, catedrático de la Facultad de Economía de laBenemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), reconoció quegran parte de la industria poblana está vinculada con EstadosUnidos por la importación de equipo y la exportación demanufactura y de vehículos automotrices.
Para tener una idea del papel de Estados Unidos en la industriamexicana -a decir de la Asociación Mexicana de la IndustriaAutomotriz (AMIA)-, en lo que va de 2016, la región deNorteamérica compró 86 de cada 100 autos fabricados enMéxico.
En este contexto, Juárez reflexionó que a las empresastrasnacionales no les conviene retirar su capital del país debidoa la mano de obra barata que aquí consiguen.
“El anuncio de Trump (sobre aumentar aranceles) busca impactoen la cabeza de los trabajadores (estadounidenses) sobre el hechode que supuestamente las empresas han invertido en países comoMéxico. Quiere culpar a los mexicanos de que les han quitadoempleos a los norteamericanos, eso no es cierto porque lasinversiones que se han hecho en México están pagando niveles deprestaciones muy inferiores a las que se pagan en EstadosUnidos”.
El especialista de la BUAP señaló que los empleados poblanos–sobre todo del sector autopartes- no deben estar preocupados poruna posible pérdida de empleos o cierre de fábricas.
Incluso, Huberto Juárez recordó que la empresa Ford enfrentóa Trump cuando éste dijo que habría afectaciones para el trabajoen Estados Unidos, al transferir su producción a México.
Juárez expuso que al menos en el sector automotriz, EU producemás de 11 millones de unidades al año y México apenas pasa delos 3 millones, por lo que ésta última solo es complementaria.Concluyó que en caso de ganar Trump, no habría afectacionesporque las empresas defenderán sus intereses, lo mismo que otrossectores gubernamentales.
EU es la principal socia comercial de México, revelan datos delgobierno federal. Al menos en el periodo de 1999 a 2016, haaportado un 51.7 por ciento de la Inversión Extranjera Directa(IED), la cual se extiende a Puebla, sobre todo a la industriaautomotriz.
POCO FACTIBLE IMPEDIR ENVÍO DEREMESAS
Datos del Banco de México (Banxico) refieren que de enero aseptiembre de este año, Puebla ha recibido mil 084 millones dedólares por recepción de remesas.
Debido a que Trump amenaza con bloquear las remesas para orillara México a pagar un muro, la académica Verónica Reyes dijo quees una propuesta complicada, pues el hoy candidato arriesgaría susempresas –dedicadas al envío de dinero- como Western Union.
“Habría muchos conflictos y Puebla tendría un gran efectopues reduciría el 40 por ciento la reducción de remesas porque lamayoría de los migrantes que se van a trabajar, se van a NuevaYork”, señaló.
En este sentido, el académico de la Ibero, José Luis GarcíaAguilar, no descartó que los latinos (y poblanos) recurran aalternativas como triangular los recursos, es decir, que primerolos manden a cuentas europeas y luego los reorienten hacia susfamilias.
HAY ALTERNATIVAS
García Aguilar dijo que aunque el panorama no sea desalentador,México debe abrirse a oportunidades comerciales con otros paísesdel extranjero.
Acerca de la propuesta de una construcción del muro, elacadémico señaló que grupos de ambientalistas empezarían amovilizarse porque este proyecto afectaría el ecosistema.
Verónica Reyes agregó que aun en la presidencia “DonaldTrump no sería omnipotente”, pues hay equilibrio de poderes.