Usar condón durante las relaciones sexuales, no tenerle miedo ala pruebas de detección y tenerle confianza a sus seres queridosen caso de poseer la infección, fueron los consejos que, paraprevenir el VIH y para saber vivir con esta enfermedad, brindaronMario y Rogelio, varones de 51 y 23 años de edad a los que lesdiagnosticaron el Virus de Inmunodeficiencia Humana desde hace 20 y1 año, respectivamente.
De 1983 al segundo semestre de 2017, se registraron en Puebla 8mil 463 casos de Sida, que colocan a la entidad en el séptimolugar con el mayor número de personas infectadas y que representanel 4.4 por ciento de los casos a nivel nacional, segúninformación del Centro Nacional para la Prevención y el Controldel VIH y el Sida (Censida).
Este de 1 de diciembre se celebra el Día Mundial de la Luchacontra el Sida. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud(OMS) en 2017 tiene el lema "Todos cuentan. Terminemos con elSida”, campaña con la que se busca fortalecer el apoyo en larespuesta al VIH en las Américas y tomar pasos innovadores paraque la región pueda alcanzar las metas mundiales para acabar conla pandemia en el 2030.
POR DESQUITE MEINFECTARON
Mario tiene 51 años y de ellos 20 los ha vivido con VIH quecontrajo por un “desquite” de una persona cuando retornó aMéxico de Estados Unidos, en donde fue a realizar susestudios.
Como un acto de responsabilidad, decidió no contraer matrimonioy mucho menos tener hijos, a fin de evitar que se propagara laenfermedad. “No mecasé precisamente por esto, no quise provocar una infección a unapersona extra y por eso no me casé”,dijo. El regreso de Mario a México no fuesatisfactorio, pues antes de que le diagnosticaran VIH lerealizaron mal una operación que hasta la fecha le sigue causandovértigo, problemas de visión y habla, así como pérdida dememoria; él solo llegó al hospital por un dolor de cabeza.“Yo viví en EstadosUnidos y regresé a México y aquí me infectaron, fue una personapor desquite (…) yo viví en la Ciudad de México también,regresé por dolor de cabeza, me hicieron una raquea mal hecha, mederramaron líquido, sufrí de vértigo constante, problemas devisión, problema de habla y pérdida de memoria”,contó.
A raíz de esta operación mal hecha abandonó su trabajorelacionado con la iluminación, por lo cual actualmente es apoyadoeconómicamente por sus padres y sus ocho hermanos, y sutratamiento lo está recibiendo en el Instituto Mexicano del SeguroSocial (IMSS).
Mario reconoció que a 20 años del diagnóstico su vida hacambiado drásticamente por los cuidados que debe tener. Admitióque a determinados amigos les tiene que ocultar su enfermedad pormiedo a la discriminación, no obstante, reportó que hasta elmomento no ha sufrido este trato diferenciado.
“Lo que yo le diría a lagente es que obviamente se cuiden mucho, que usen el condón, si esque van a tener relaciones, que comuniquen y tengan mucha confianzaa sus padres sean homosexuales o sean heterosexuales, que tengan laconfianza”, exhortó.
AGRADECIDO CON DIOS PORQUE ME PERMITEESTAR AQUÍ
Rogelio es un joven de 23 años de edad, que en diciembre delaño pasado fue diagnosticado con VIH. El estudiante deestomatología está agradecido con Dios por permitirle seguir convida. “Agradecidocon Dios principalmente que es el que me está permitiendo estaraquí y si sigo aquí es para dar ejemplo y testimonio para losdemás”, dijo. Confió que adquirió elvirus por medio de relaciones sexuales sin protección, sucedidasen 2014. Desde hace un año dijo que ya presentía que lo habíancontraído porque se sentía mal de salud (síntomas de gripe muyavanzada), sin embargo, las pruebas de laboratorio le arrojabanresultados negativos.
Dijo que fue en diciembre de 2016 cuando se enteró al momentode realizarse la prueba en la escuela en la que estudia. Dijo queni él ni su familia recibieron la noticia con sorpresa ni lescausó depresión sino al contrario se dijo feliz porque le fuedetectada a tiempo, lo cual le ha permitido atenderse.
“De parte de mifamilia tengo el apoyo, no les tomó de espanto, ellos me estánapoyando mucho, en cuestión mía ya lo veía venir, entonces no metomó de sorpresa, no estoy deprimido, al contrario estoy felizporque lo detectaron a tiempo y puedo tener un tratamiento para queno se sigan replicando el virus”, dijo.Contrario a recibir discriminación en su universidad, refirió quele están abriendo las puertas para que pueda ofrecer pláticas ysobre todo pueda llevar a cabo un protocolo e investigación de supropia sangre, aterrizada en el VIH en el área de Estomatología.“Lamentablemente sífue por relaciones sexuales porque en un momento que no pensé memetí con una persona y ya después cuando quise buscar a estapersona ésta desapareció, hasta después me enteré que estabainfectado”, dijo. Al igual que Mario, eljoven Rogelio, que está siendo atendido de igual forma en el IMSS,lanzó una invitación a la ciudadanía en general: “lo que yoles diría es que tengan consciencia, que no hagan las cosas porhacerlas, por un buscar un placer de un solo rato o una diversióncualquiera sino que realmente tomen conciencia, que piensen enellos mismos y que si van a hacer algo que lo hagan conprotección”.PUEBLA, EN SÉPTIMO LUGAR CON MÁSCASOS DE SIDA
Datos del Centro Nacional para la Prevención y el Control delVIH y el Sida (Censida), Puebla ocupa el séptimo lugar con elmayor número de casos registrados de Sida de 1983 al segundosemestre de 2017 al contabilizar 8 mil 463 (6 mil 643 hombres y mil820 mujeres), cifra que representa el 4.4 por ciento de los casos anivel nacional.
De 2007 a la fecha, el año 2009 fue el que más casos reportóPuebla pues se presentaron 326 contra los 88 que han sidoreportados de enero a junio de este año.
Según el Censida, de 1983 a 2006 se registraron 5 mil 886; en2007, 317; en 2008, 298; en 2010, 236; en 2011, 241; en 2012, 199;en 2013, 201; en 2014, 200; en 2015, 267; y en 2016, 204.
En cuanto a los casos con VIH -que es cuando el virus seencuentra en el organismo en etapa de multiplicación pero sinllegar a la etapa más grave- el estado de Puebla contabilizó de1984 al segundo semestre de 2017 un total de 3 mil 151 (2 mil 464hombres y 687 mujeres), los cuales representan el 4.5 por ciento delos 69 mil 479 casos nacionales.
De acuerdo con Leopoldo Flores Flores, médico adscrito alservicio de Infectología del IMSS, a la institución le cuesta almes hasta 50 mil pesos el brindar medicamento a un paciente conSida en estado avanzado, mientras que las personas que recién seles detectó el VIH le significan de 5 a 10 mil pesos en el mismoperiodo.
Refirió que cada paciente es diferente pues dijo que mientrasunos pueden debutar con problemas respiratorios, otros lo hacen conproblemas digestivos, problemas neurológicos con crisisconvulsivas y dolores de cabeza. “Si un paciente les hacemos susestudios al inicio y le damos su tratamiento va a vivir el tiempoque quiera, tenemos pacientes de 25 a 30 años que tienediagnóstico y tienen tratamiento, son medicamentos nuevos, sonmedicamentos de alto costo, entonces hay que estar al pendiente”,dijo. Los pacientes portadores del VIHoscilan entre los 20 a 40 años, no obstante, existen pacientes dehasta 85 años, siendo la mayoría varones. “Se ha incrementado mucho elnúmero de pacientes por la falta de información (…) ahorita porla contingencia (del temblor) estamos viendo más de 40 pacientescon VIH al día”, dijo. Puntualizó que através de relaciones sexuales y el amamantamiento es como setransmite este virus en la actualidad, siendo ya pocos los casosque se transmiten por trasfusiones de sangre y los tatuajes por elcompartimiento de agujas: “no por saliva, no por sudor, no porlágrimas”, subrayó.