Una persona que sufre discriminación por sus preferencias sexuales está condicionada a tener prácticas eróticas en lugares clandestinos y es más propensa adquirir Infecciones de Transmisión Sexual por no contar con acceso a métodos anticonceptivos, lo que le impide tener una salud sexual adecuada y por lo mismo no puede ser feliz.
El 4 de septiembre se conmemora el Día Mundial de la Salud Sexual, instaurado por la Asociación Mundial por la Salud Sexual (WAS, por sus siglas en inglés) con la finalidad de hacer énfasis sobre la necesidad de promover mayor conciencia sobre esta práctica.
El lema de este 2018 es “La salud sexual y los derechos sexuales son FUNDAMENTALES para el bienestar”. De acuerdo con WAS “la sexualidad es un elemento central y aspecto del ser humano que abarca el sexo, las identidades y roles de género, la orientación sexual el erotismo, el placer, la intimidad y la reproducción”.
Brahim Zamora Salazar, integrante del Observatorio Ciudadano de Derechos Sexuales y Reproductivos (Odesyr), sentenció que la salud sexual no solo tiene que ver con la carencia de ITS o planificación familiar sino también con el acceso a métodos anticonceptivos, legalización del aborto, reducción del riesgo de embarazo en adolescentes y permitir la diversidad sexual.
“La salud tiene que ser entendida como un estado de bienestar general, no solamente físico sino también emocional, mental y ambiental; es decir, que el entorno también sea favorable, por eso es pertinente hablar de discriminación cuando hablamos de salud sexual porque no vamos a obtener una adecuada salud sexual si vivimos en ambientes excluyentes y discriminatorios que afectan la salud emocional de las personas”, expresó.
LAS CIFRAS
De acuerdo con los resultados de la Encuesta Nacional sobre Discriminación 2017 presentada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) Puebla es uno de los estados con mayor prevalencia de discriminación.
Ante la pregunta: En su opinión, ¿cuánto se respetan en el país los derechos de personas gays o lesbianas?, el 65.5 por ciento de los que respondió que poco o nada.
El mismo documento exhibe que el 56.6 por ciento de la población no estaría dispuesta a que sus hijos se casen con una persona con Síndrome de la Inmunodeficiencia Adquirida (SIDA) o el Virus de la Inmunodeficiencia Humana (VIH), mientras que el 43 por ciento rechazó esta unión con personas del mismo sexo.
SEXUALIDAD SIRVE PARA SER FELIZ
Zamora Salazar agregó que es un derecho tener la libertad para ejercer la sexualidad, sin embargo, dijo que cuando una persona ve vulnerada, su identidad sexual y de género se pone ante condiciones de vulnerabilidad frente a temas muy específicos como el VIH-SIDA, debido a que tiene que practicar su erotismo de forma clandestina.
“La discriminación es un factor que atenta contra la salud sexual, contra el bienestar y por eso es muy importante que se articulen respuestas contundentes, es un tema que no le ha importado al gobierno del estado y que tiene ciertas consecuencias graves”, dijo, entre las que hay exclusión, violencia e impunidad, por los que tienen que pasar muchas personas.
Señaló que las personas discriminadas por su sexualidad se ven obligadas a realizar estas prácticas de forma clandestina y en lugares insalubres que expone a las personas a adquirir infecciones, no usar métodos de protección y a ser víctima de extorsión o asaltos, por mencionar algunas.
“La vida es muy importante por el placer, que genera cosas en el cuerpo de las personas como endorfinas y una serie de hormonas que sirven para el bienestar, para sentirnos bien. Siempre y cuando la vida sexual activa sea segura, informada, plena, libre de culpas y de miedos”, puntualizó.