La propuesta sobre designar asientos para uso exclusivo de las mujeres en el transporte público para prevenir el acoso sexual podría fracasar en caso de que no esté acompañada de una estrategia integral, consideró Diana Mantilla Gálvez, colaborada del Centro de Análisis, Formación e Iniciativa Social (CAFIS).
En entrevista con El Sol de Puebla, la integrante del espacio enfocado en los derechos humanos, erradicación de la violencia de género, entre otros, compartió que la iniciativa debe de incluir campañas de comunicación y sensibilización enfocado en personas agresoras respecto a las sanciones que existen, así como los usuarios para que haya nuevas prácticas de convivencia y coordinación interinstitucional, con la finalidad de garantizar una vida libre de violencia.
De no tomarse en cuenta dichos puntos, puede suceder lo mismo que el implementado desde 2019 en las líneas de la Red Urbana de Transporte Articulado (RUTA), espacios que no se respetan debido a la falta de sensibilización por parte de conductores y pasajeros.
“Este conjunto de condiciones estratégicas integrales no pasa y por ende creo que tiene un impacto nocivo a lo que se desea. Lo hemos visto en el RUTA que al establecerse estos vagones exclusivos genera incomodidad en los otros usuarios porque no hay campañas de comunicación y sensibilización que estén enfocadas en las personas agresoras respecto a las sanciones que existen, así como los usuarios para que haya nuevas prácticas de convivencia en los espacios”, opinó.
En este sentido, Mantilla Gálvez comentó que se debe de evitar creer estos asientos son un privilegio para las mujeres, pues el sentido por el que existe el lugar es debido a que 9 de cada 10 mujeres ha sido víctima de violencia en espacios públicos. “No hablamos de privilegios, es una desigualdad que está afianzada en prácticas naturalizadas que creemos que debemos dejar pasar o no hacer visible”.
La integrante de CAFIS explicó que el acoso sexual en el transporte público abarca diferentes niveles de impacto y agresión mismas que pueden ir desde verbales—silbidos, comentarios de naturaleza sexual explícita--, visual—miradas lascivas, seguir o perseguir a la víctima, masturbación, tomar fotografía--, violencia física—tocamientos, rozamientos de genitales de quien agrede en el cuerpo de la víctima--, colocando a la víctima en un estado de indefensión.
73% DE LAS MUJERES VIAJA ACOMPAÑADA PARA EVITAR ACOSO EN EL TRANSPORTE
De acuerdo con datos del gobierno federal, en el estado de Puebla el 76 por ciento de las mujeres usa el transporte público acompañada de otra mujer para evitar ser víctima de acoso sexual.
A este panorama se suma que, los resultados del cuarto trimestre del 2021 de la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU) elaborada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), arrojaron que el 90.4 por ciento de las mujeres encuestadas dijo sentirse insegura en el transporte público.
Por último, Diana consideró que estos datos deben de informarse a los usuarios para que tengan conocimiento del panorama en el que viven las mujeres y erradiquen la creencia de que la exclusividad de asientos es un privilegio.
CONCESIONARIOS PIDEN MESAS DE DIÁLOGO
Incluirlos en las mesas de diálogo para saber cómo operarán es lo que piden asesores de transportistas y concesionarios consultados por El Sol de Puebla sobre la designación de asientos para uso exclusivo de las mujeres en unidades con la intención de prevenir el acoso sexual.
Javier Ruiz, representante de la Ruta 41; Arturo Loyola, asesor de transportistas, y Anuar Musalem, representante de la Asociación Mexicana del Transporte y Movilidad, coincidieron en que es una buena estrategia implementar espacios exclusivos para este sector de la población, acción en donde autoridades, transportistas y ciudadanía deben de trabajar en conjunto para su correcto funcionamiento.
En voz del primero mencionado consideró que los transportistas deberían sentarse a platicar con las autoridades correspondientes para conocer a fondo las propuestas. Declaró que se debe de impulsar una concientización entre la sociedad para que conozcan sobre ello y se logre respetar los asientos.
Además, descartó que, en caso de aprobarse en el Congreso local la iniciativa, entorpezca el proceso de modernización de unidades, pues recordó que el compromiso de la transformación del transporte está pendiente desde años atrás.
“La cuestión de tener asientos para el sexo femenino yo lo veo bien porque todos tenemos mamá, hermana, abuela y nos gustaría que fueran seguras, nos preocupa la inseguridad que hay en contra del sexo femenino”, comentó.
Javier evitó dar una propuesta de cuántos asientos podrían asignarse para este sector de la población, pero consideró que se debe de analizar el tipo de unidad.
En tanto que Arturo Loyola declaró que es una buena propuesta y quien esté en contra de esta serían “personas sin escrúpulos o enfermos sexuales”, debido a que el acoso sexual es un problema recurrente en estos espacios.
“Es una propuesta positiva pero no suficiente para poder combatir este tipo de actos, creemos que debe de ir más acompañada de campañas de sensibilización hacia la ciudadanía. En las horas pico cuando se dan más casos de acoso, y a eso sumamos que suben personas de la tercera edad, es totalmente insuficiente para una combi o un camión”, opinó.
No obstante, cuestionó el método para controlar el uso exclusivo de asientos: “¿Cómo le van a hacer? ¿Cómo lo van a controlar? Es difícil por las condiciones del servicio”.
Loyola se sumó a la petición de coordinarse con las autoridades para conocer a detalle la propuesta y su ejecución e incluso abrió la posibilidad de proponer que las unidades cuenten con anuncios donde se lea las sanciones por acoso sexual y frases de concientización.
El representante de la Asociación Mexicana del Transporte y Movilidad, dijo que es un buen ejercicio ya que “socialmente no estamos lo suficientemente educados para respetar a todos los seres humanos” y consideró que las féminas se sentirían más tranquilas en estos lugares.
Sin embargo, también externó que la incógnita sería los asientos que se otorgarán en los diversos tipos de unidades del transporte público.
En contraste con las posturas anteriores, dijo que no es necesario que transportistas “negocien” el tema con las autoridades ya que los segundos—seguramente-- aplicaron estudios y análisis que dictaminaron la necesidad y viabilidad de la propuesta.
Pero si se unió a la interrogante sobre quién vigilará que los asientos sean respetados, por lo que consideró que debe de existir un protocolo de actuación para validar el decreto.
Por último, descartó que esta posible obligación entorpezca la modernización del transporte público.
La propuesta fue presentada por la diputada del PRI, Isabel Merlo Talavera, en la Comisión de Transporte y Movilidad del Congreso de Puebla, misma que busca reformar la ley en la materia con la finalidad de prevenir que las mujeres sean víctimas de agresiones sexuales. La iniciativa debe ser llevada y aprobada en el Pleno para su aprobación.