Si la Iglesia mexicana logra establecer un diálogo con el gobierno para presentar los acuerdos emanados del Diálogo Nacional por la Paz estará cubriendo una mínima parte del reto que implica combatir la inseguridad y la violencia en México, opinó el rector de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP).
En entrevista con El Sol de Puebla al concluir este foro, realizado en la Universidad Iberoamericana Puebla, el rector compartió que el objetivo de la nueva estrategia de seguridad, propuesta por la iglesia católica, no es llegar a los gobiernos, sino a la sociedad.
Desde su perspectiva, la Iglesia escogió el momento ideal para acercarse a las autoridades, por lo que hay gran posibilidad de que sea bien recibida, sin embargo, lo difícil de esta estrategia es convencer a la ciudadanía. “Más que generar una coordinación muy rigurosa, se esta pretendiendo generar un movimiento”, aseguró.
Lo complejo de este trabajo es lograr convencer a cada individuo, incluyendo a quienes no simpatizan con la iglesia, a asumir su responsabilidad en la construcción social desde el ámbito que le corresponde y a la vez, que mantenga una rigurosa exigencia de resultados a las autoridades, subrayó.
“La perspectiva que radicalmente tenemos que cambiar es asumir la responsabilidad, lo más importante de esta propuesta es que demos el paso de atender nuestro ‘metro cuadrado’ y generar un punto de inspección”, dijo.
Expuso que, si bien las autoridades son un eje fundamental en el combate a la inseguridad, el acercar estas propuestas no garantiza su implementación ni un cambio en el país, por eso es importante que la ciudadanía también exija el cambio poniendo el ejemplo.
Por lo anterior, el rector hizo un llamado a los diversos sectores sociales a tener disposición de poner en marcha los acuerdos de la iglesia, desde el ámbito comunitario hasta en el familiar.
Hay que recordar que, el pasado 23 de septiembre y como resultado del trabajo realizado en el Diálogo, la Conferencia del Episcopado Mexicano presentó 14 acuerdos para iniciar la construcción de paz en el país ante los altos índices de violencia.