A un mes del paso del huracán “Grace” que causó afectaciones en 64 municipios del estado de puebla y aún en medio de las necesidades básicas, han surgido una serie de inconformidades en poblaciones de las Sierras Norte y Nororiental, respecto a la forma en la que se llevaron a cabo los censos y ahora como ha comenzado la entrega de apoyos del gobierno federal.
La versión que se repite en las poblaciones es que quienes fueron incluidos en este padrón, no es gente afectada, sino amigos, familiares, compadres, compañeros de organización e incluso de partido de los llamados “servidores de la nación”, todo ello bajo el consentimiento de funcionarios públicos.
Uno de los casos más destacados es el municipio de San José Acateno, donde pobladores acusaron a María Elena Sánchez Hernández, quien fungía como coordinadora de los servidores de la nación en dicho municipio, de beneficiar a sus padres, aún y cuando su única vivienda no sufrió daño alguno por el meteoro; además la acusan de manipular dicha entrega, mientras que es su esposo quien se encuentra al frente de dicha tarea.
De la misma forma, fue en el municipio de Tenampulco donde pobladores de diferentes comunidades, dieron a conocer a través de redes sociales, que pese a las afectaciones que sufrieron, ahora enfrentan una ayuda deshumanitaria: “cómo es posible que en nuestros pueblos exista la misma situación, sin que haya consideración para aquellos que fueron afectados realmente por el paso del huracán, el censo (es) de las casas que no fueron afectadas”.
Ante tal hecho, calificaron como ciegos a quienes llevaron a cabo el censo o en su defecto que recibieron mordidas para incluir a gente que no resultó afectada, indicando que “este tipo de corrupción, injusticias, apoderamiento y marginación, no tienen dignidad, ni sentimiento humano para la gente que se quedó sin techo”.
En el caso del municipio de Olintla, que resultó ser uno de los más afectados, los pobladores han comenzado a recibir ayuda en especie, tales como láminas, despensas, cobijas, agua embotellada, entre otros insumos, destacando el caso de una familia conocida como los Vázquez, quienes habitan en una cercana al río, cuyas viviendas resultaron con graves daños en su estructura. Algunos de ellos que no lograron recibir algún tipo de apoyo, puesto que parte de lo que llegó, fue insuficiente para el gran número de damnificados.
En tanto, en el municipio de Atempan, autoridades de este lugar hicieron un llamado a la población a no dejarse engañar por estafadores, quienes se encuentran haciendo llamadas telefónicas por parte de supuestos “servidores de la nación”, que ofrece apoyos por afectaciones del huracán, mismos que otorgan un número de cuenta, a fin de que la ciudadanía deposite ciertas cantidades de dinero, con lo cual hacerse acreedores a este tipo de beneficios.
PROTESTAN EN TEZIUTLÁN
Bajo una estimación de un 60 por ciento de la población que no fue censada y por tanto no ha recibido apoyos, campesinos e integrantes del Movimiento Independiente Obrero, Campesino, Urbano y Popular (MIOCUP), de municipios como Ayotoxco de Guerrero, Jonotla, Cuetzalan, entre otros, marcharon el lunes por calles y avenida de Teziutlán, a fin de denunciar la manipulación a conveniencia de los censos realizados tras el paso del huracán Grace.
De acuerdo con lo expuesto por Darío Varón, coordinador regional de MIOCUP, “los servidores de la nación en toda la región nororiental, dieron actos de preferencia y proselitismo, durante estos apoyos que se estuvieron dando”, señalando que la mayoría de quienes participaron en esta protesta, sufrieron daños a sus viviendas, sin haber sido censados y hoy sin recibir ningún tipo de beneficio.
“Es injusto que le den el apoyo a personas que tienen los recursos económicos, mientras nosotros pues estamos luchando día a día, muchos somos artesanos y otros campesinos y no se llegue ese apoyo”, señaló.
El coordinador de la organización indígena confirmó que ya se están entregando los apoyos del gobierno federal, pero sobre todo a “las personas que han sido seleccionadas amañadamente, yo lo dudo que los servidores hayan hecho su mayor esfuerzo, pero la mayoría de la gente necesitada no fue censada, cesaron a la gente de la carretera, pero de quienes viven en la veredas o comunidades, no quisieron ir”.