Puebla, quinto lugar nacional en delitos electorales

Nuevo León encabeza el número de querellas

Verónica De la Luz

  · domingo 22 de julio de 2018

Con 26 querellas durante junio, Puebla se situó en quinto lugar nacional respecto a las denuncias relacionadas con delitos electorales, esto, ubicándose en el mismo nivel que estados como Tamaulipas, Jalisco, San Luis Potosí y Querétaro.

En su estadística mensual, el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) precisa que Puebla acumuló 26 denuncias en el mes previo a la elección.

En junio hubo 466 denuncias por delitos electorales en el país, pero hay que recordar que además de la violencia –como la que ocurrió en Puebla el día de la elección-, existen otros delitos electorales que no implican esta agravante, como lo pueden ser votar más de una vez, acarreo de personas para votar, comprar votos, retener identificaciones, votar con credenciales ajenas, usurpar a funcionarios de casilla, entre otros contemplados en la Ley General en Materia de Delitos Electorales.

Las entidades que antecedieron a Puebla en denuncias por delitos electorales, son: Nuevo León (63), Michoacán (54), Oaxaca (46) y Ciudad de México (38).

Los estados que concentraron 26 querellas, igual cifra que Puebla: Jalisco, Querétaro, San Luis Potosí y Tamaulipas.

Las cifras del SESNSP indican que en el caso de Puebla, en el primer semestre de 2018 se acumularon 32 denuncias penales por algún delito electoral. No se presentó ninguna durante los meses de enero, febrero y abril.

En marzo se registró una querella y en mayo hubo cinco denuncias por delitos electorales. En las estadísticas no se especifican los delitos a los que correspondieron las denuncias presentadas ante las autoridades competentes, es decir, ante la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (Fepade) o la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales en Puebla (Fepadep).

EN JULIO, 24 DENUNCIAS FUERON INTERPUESTAS POR EL INE

Las estadísticas surgieron antes del fatídico 1 de julio de 2018 en Puebla, un proceso electoral concurrente (en el que se eligieron seis cargos) que los mismos consejeros locales del Instituto Nacional Electoral (INE) calificaron como manchado de sangre, por lo que implicó disparos en las casillas electorales, cuatro heridos de bala y robo de urnas.

Estas denuncias se interpusieron al paso de la elección, cuando ya se podían contabilizar los daños y reunir las evidencias; se sumarán al listado de querellas correspondientes a julio.