En los dos primeros meses de 2022 el estado de Puebla registró 36 eventos violentos, destacando los actos de tortura e intentos de linchamiento. Este panorama le dio el onceavo lugar a nivel nacional con mayor número de acontecimientos.
De acuerdo con los datos hemerográficos que lleva la asociación Causa Común para enero y febrero de este año se documentó el hallazgo de fosa clandestina, tortura, asesinato de infantes y adolescentes, intentos de linchamiento y actos violentos entre grupos delictivos, contra la autoridad o por parte de multitudes.
A nivel nacional, la cifra fue de 894 acontecimientos de los primeros dos meses. La lista la encabezó Michoacán con 75 eventos, Guanajuato con 74, Baja California con 53, Guerrero con 50 y Zacatecas con 48 eventos violentos.
TERCER LUGAR EN INTENTOS DE LINCHAMIENTO
La información hemerográfica de la organización revela que el territorio se posicionó en tercer lugar nacional en casos de intento de linchamiento con cuatro registros, solo por debajo de Hidalgo que tuvo siete y Tlaxcala con cinco.
Además, en la entidad poblana hubo el hallazgo de una fosa clandestina, seis descuartizamientos y 13 casos torturas.
Así como un asesinato de un menor de edad, cinco homicidios de mujeres con extrema violencia, dos masacres y dos enfrentamientos de grupos criminales con autoridades.
En el país se documentaron en fuentes periodísticas 27 fosas clandestinas, 80 masacres, 164 descuartizamientos, 29 calcinamientos, 221 torturas, 59 asesinatos de menores de edad y 122 asesinatos de mujeres con extrema violencia.
También se registraron dos homicidios de defensores de derechos humanos y de seis periodistas, diez asesinatos de actores políticos y 32 asesinatos de funcionarios que se desempeñaban en temas de seguridad.
Además de 14 casos de trata de personas, 34 intentos de linchamiento y tres personas linchadas, siete actos violentos contra migrantes y 58 enfrentamientos entre autoridades y grupos delictivos.
Ante este panorama, Causa Común mencionó que parte de estas atrocidades son perpetradas por personas que no forman parte de organizaciones criminales, más bien involucra violencia familiar, comunitaria y social por lo que llamó a la ciudadanía a trabajar para erradicar los “rasgos más oscuros de la sociedad” y no ignorar el tema.