Las zonas aledañas al volcán Popocatépetl, así como el municipio de San Martín Texmelucan, son los principales lugares de la entidad poblana en donde la actividad humana sobrecargó la capacidad de resiliencia de la naturaleza, informó Mario Daniel Ignacio Gómez Soberón, coordinador estatal del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
Lo anterior fue expuesto durante un foro realizado en la Universidad Iberoamericana Puebla, donde el coordinador aseguró que este rango representa un riesgo tanto en el uso de los recursos naturales como en el cuidado de las zonas naturales protegidas de Puebla.
En el caso particular del corredor Puebla-San Martín Texmelucan, Gómez Soberón precisó que esta zona contaba con una gran productividad agrícola de maíz por encima de la media nacional que es de 15 kilos por hectárea y que en esta área estaba por encima de los 18 kilos.
“Esos suelos son áreas de gran productividad y ahora la estamos ocupando toda para viviendas, va a haber mayor población y menos alimentación, así como una reducción de captación de agua, esa zona en corto plazo va a convertirse en un lugar de alto conflicto”, opinó.
En relación a las zonas aledañas al volcán Popocatépetl, el coordinador señaló que este es otro ejemplo de la falta de ordenamiento territorial y de la sobrecarga de actividad humana, pues incluso al ser una zona de alto riesgo, existe población habitando el área.
“Establecimos en qué zonas debía limitarse el crecimiento urbano por cuestión del Popocatépetl, y sin embargo, vamos por allá y están haciendo desarrollos habitacionales, aunque se sabe el riesgo que se corre”, advirtió.
Ante este conflicto, consideró importante el desarrollo de proyectos de ordenamiento territorial, los cuales han sido planteados por parte del INEGI en Puebla, pero que requieren la colaboración entre academias, gobiernos y sociedad civil.
“Puebla cuenta con zonas apropiadas para el desarrollo económica pero también con muchos municipios en situación de riesgo, el ordenamiento territorial es la clave, que se concibe como una práctica científica a para comprender la relación entre los elementos que conforman la región”, finalizó.