La renovación de las unidades no resuelve la crisis económicadel transporte público, pues de cualquier modo se consumencombustible e insumos que han subido de precio considerablemente,consideraron el delegado en Puebla del sector de Pasaje Urbano ySuburbano de la Confederación Nacional de Transportistas Mexicanos(Conatram), Benjamín González Loyola y el presidente deTransportes Unidos Región Valsequillo Independientes, MarcoAntonio Méndez Salas.
A propósito de la propuesta del gobernador, Rafael MorenoValle, de crear un fideicomiso que con recursos federales yestatales financie la renovación de unidades de transportepúblico, como estrategia para evitar el incremento a la tarifa delservicio, los representantes de ambas organizaciones consideraronque sería un paliativo para mejorar los vehículos pero tan sólode una parte de los concesionarios, no obstante que todos utilizancombustible.
A decir de González Loyola, de los 400 permisionarios de laConatram, sólo unos 20, podrían beneficiarse con esta medida,toda vez que son aquellos cuyas unidades están próximas a cumplirlos 10 años de servicio que permite la Ley de Transporte y que portal razón tendrán forzosamente que cambiar sus vehículos.
Pero el resto explicó, tienen unidades con vida útilsuficiente e incluso en proceso de financiamiento, a quienes no lesconvendría adquirir un segundo crédito para cambiar nuevamente deunidad.
En su opinión, una mejor propuesta serían los subsidios parala conversión del sistema de combustible, de gasolina o diésel agas natural, pues independientemente de la antigüedad de losautomotores, todos hacen uso de combustible.
Y es que comentó, pocos permisionarios cuentan con el capitalsuficiente, más de 30 mil pesos en promedio, para hacer estecambio, no obstante que el precio del gas natural es hasta 50 porciento más económico que la gasolina y el diésel, “si sehiciera a lo mejor ya ni tendríamos necesidad de subir latarifa”, agregó.
Además, recordó, la mayoría de los transportistas sonresponsables de la renovación de la unidad, pues todos saben quela sanción por no hacerlo les puede costar el retiro de laconcesión, “eso lo hacemos a fuerza, porque si no, tenemos unapenalización grave”, completó.
Por su parte, el presidente de Transportes Unidos RegiónValsequillo Independientes, Marco Antonio Méndez Salas, tambiéncoincidió en decir que la renovación de las unidades detransporte público no es suficiente, porque no favorece a que lostransportistas puedan tener los recursos necesarios para cubrir losgastos de su operación.
En su opinión, los beneficiados de un fideicomiso serían lospermisionarios cuyas unidades cubren rutas foráneas con pocosingresos, de 400 pesos diarios o menos y que no tienen el poderadquisitivo para un financiamiento automotriz con el cual puedanrenovar sus unidades, las cuales dependiendo del tipo, cuestanentre 800 mil pesos y 1.5 millones de pesos.
Pero el resto, continuó, seguirá padeciendo por no contar conlos recursos necesarios para cubrir sus gastos por consumo decombustible.
“Eso no va a resolver los incrementos de los costos deoperación, así que no le veo gran solución”, indicó.
Para terminar, ambos coincidieron en que permanecerán a laexpectativa de los detalles acerca de las reglas de operación delfideicomiso que propone el gobernador, para tratar de aprovecharloal máximo.
