La plataforma Airbnb, que buscará ser regulada por los hoteleros poblanos, reduce hasta un 93 por ciento el costo de las habitaciones rentadas por los visitantes a la entidad, pues, mientras que la noche en un hotel del primer cuadro puede costar 3 mil 910 pesos, el hospedaje en una casa particular de la misma zona puede salir en solo 261 pesos.
El presidente de la Asociación Poblana de Hoteles y Moteles, Gustavo Ponce de León, adelantó que el gremio buscará que la plataforma sea regulada por la administración pública de los tres órdenes de gobierno debido a que esta implicaría una competencia desleal para los empresarios del ramo.
Luego de esa declaración se identificó que, mientras los costos por noche en los hoteles del primer cuadro de la capital van de los 680 pesos a los 3 mil 910 pesos por habitaciones sencillas y sujetas a disponibilidad, en la plataforma digital los costos son más bajos.
En una búsqueda se aprecia que los precios de los hoteles en el primer cuadro se cotizan en dólares, además de tener que añadirles el IVA, pues en sus páginas de internet no lo traen incluido.
Asimismo, se encontró que las habitaciones de los hoteles tienen un precio por arriba de los mil pesos por noche en la mayoría de los casos. Solo en algunas excepciones se encuentran hoteles en el Centro Histórico con costos desde 570 pesos o de 680 pesos por noche, aunque esto hablando de habitaciones sencillas. Tradicionales hoteles, como el Royalty o el del Paseo, todavía dan alternativas económicas.
Pese a esta oferta otros hoteles, que tienen un diseño moderno, alberca, restaurante, bar, jacuzzi, vistas exclusivas de la ciudad y otros servicios, costean sus habitaciones sencillas en mil 749 pesos, en 2 mil 267 pesos o en casi 4 mil pesos por cada noche que uno pase en ellos, incluyendo, algunas ocasiones, desayunos o boletos para atracciones. Hay máster suits con costos superiores a los 8 mil.
En términos generales se aprecia que los costos de Airbnb son menores a los de los hoteles convencionales. Para rentar habitaciones de esta plataforma se puede bajar la app en el móvil o acceder a su página de Internet, donde se hace la reservación brindando el número de teléfono para que tanto la empresa como quien alquilará la vivienda tengan cómo localizar al cliente.
Luego de establecer contacto, huéspedes y arrendadores se ponen de acuerdo para definir una plataforma de confianza para los pagos. Airbnb recibe una comisión por cada arrendamiento que se logra.
Cabe destacar que los hoteleros de Puebla pondrán el tema de regulación en manos de las autoridades, pues en otras ciudades del mundo se tienen limitantes para el funcionamiento de esta empresa debido a que los arrendadores pagan una contribución o se les limita en cuanto a poder rentar sus propiedades por ciertos días al año, para así evitar la competencia desleal con los negocios establecidos para ese fin.