Después de diez meses como dirigente del PRI en Puebla, Lorenzo Rivera Sosa, renunció al cargo como presidente del Comité Directivo Estatal y será el delegado del Comité Ejecutivo Nacional (CEN), Américo Zúñiga Martínez, quien tome las riendas del partido de manera interina hasta que se renueve la dirigencia estatal.
Aunque Rivera Sosa no ha realizado ningún pronunciamiento sobre su salida, el partido confirmó que ya no está al frente de la dirigencia estatal a través de una invitación a una rueda de prensa, en la que presentarán a Américo Zúñiga como delegado “con funciones de presidente” para el proceso de renovación del Comité Directivo Estatal.
Fue el 28 de marzo de 2019 cuando Rivera Sosa asumió el cargo como presidente del CDE, en fórmula con la priista Xitlalic Ceja García como secretaria general, sin embargo, ella fue la primera en dejar este cargo desde el mes de noviembre del año pasado.
En su momento, Ceja García renunció a la Secretaría General con el argumento de que su permanencia está fuera de los estatutos sin descartar la posibilidad de buscar la dirigencia del partido una vez que el CEN emita la convocatoria.
La dirigencia estatal del partido debió renovarse desde el pasado mes de septiembre de 2018, sin embargo, el proceso electoral impidió que se diera fin al periodo que inició con la expresidenta Ana Isabel Allende Cano y continuó como los exdirigentes Jorge Estefan Chidiac y Javier Casique Zárate.
Se prevé que sea en las próximas semanas cuando la dirigencia nacional emita la convocatoria para renovar la dirigencia y hasta el momento son tres los priistas que ya levantaron la mano: Néstor Camarillo Medina, Erik Salgado Trujillo y Juan Manuel Vega Rayet.
De estos tres, el más activo es Camarillo Medina, quien el pasado fin de semana sumó el respaldo de expresidentes municipales en una reunión a la que asistió el actual delegado del CEN y dirigente interino, Américo Zúñiga.
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