Del 2012 al 2022, San Andrés Cholula duplicó el número de hoteles y habitaciones disponibles para los turistas, al pasar de 29 a 63 inmuebles en el primer rubro y de mil 030 a 2 mil 187, en el segundo.
Así lo dio a conocer, la secretaria de Turismo y Cultura del gobierno municipal, Verónica Nava Saavedra, quien subrayó que este escenario en el ramo hotelero detona la economía local.
- Te recomendamos: Huejotzingo y Teziutlán: Conoce los atractivos turísticos de estos nuevos Pueblos Mágicos
Refirió que el crecimiento en la materia, en gran parte se atribuye a que San Andrés Cholula junto con San Pedro Cholula, fue declarado Pueblo Mágico.
Ambos municipios comparten y forman un polígono turístico, por el cual recibieron esta categoría por parte de la Federación, misma que desde el 2012 a la fecha, conservan.
“En el 2012 se tenían 29 hoteles y hasta el 2022, la cifra ya es de 63 y en cuanto al número de cuartos disponibles, en la misma comparativa pasó de 1030 a 2187, lo que representa un crecimiento importante”, apuntó.
Nava Saavedra, al igual dijo que la llegada de turistas, quienes son los que pernoctan en el municipio por uno o más días, también muestra un incremento favorable.
En el 2012 -continuó- fueron contabilizados 183 mil 705, cantidad que para el 2022 pasó a 398 mil 586.
Estos datos que van al alza, también benefician el porcentaje de ocupación hotelera, que en el mismo periodo comparativo pasó de 42.16 a 37.43, que si bien el último muestra un retroceso, se debe a la pandemia por brotes de covid, que comenzaron a aparecer en marzo del 2020 y paralizaron por más de dos años, la actividad turística en este municipio, como en otros destinos del país.
La funcionaria municipal, además, habló de otra cifra alentadora para San Andrés Cholula, en cuanto a la tiempo de estancia de un turista en un hotel de este Pueblo Mágico, ya que hace una once años era de 1.5 días y actualmente es de 1.78.
Por último, indicó que esta jurisdicción vecina a la ciudad capital, cuenta con diferentes atrayentes, por lo que en esta temporada vacacional de verano, es una opción para conocer sus tesoros arquitectónicos, religiosos y prehispánicos.