El saneamiento del Río Atoyac nunca será posible sin la voluntad de la Federación, pues se requiere una inversión superior a los 7 mil millones de pesos, consignó el gobernador Miguel Barbosa Huerta. Inclusive, insistió en que clausurar las fuentes de polución del afluente también es una tarea de jurisdicción federal.
“Lo digo de manera clara, le hemos invertido año con año, de diferentes maneras [al] saneamiento del Atoyac. Se invierte año con año [en] diferentes cosas a lo largo de su trayecto, pero no habrá una recuperación si no es con el apoyo de la Federación”, reveló.
Así, en conferencia de prensa, el mandatario mencionó que, en ninguno de los años en los que él ha estado al frente del Estado poblano ha recibido del gobierno federal siquiera un peso extra, pues el presupuesto de ingresos se ha mantenido sin cambios. Por esta razón, explicó que es poco viable pensar en una fuente de financiamiento estatal que pueda ser suficiente para la recuperación del afluente.
“No he recibido ningún recurso diferente al que por fórmula nos corresponde año con año. En los tres años de gobierno que yo llevo (...) un tema sensible es el tema del Atoyac”, insistió.
En ese mismo asunto, habló también de los actores que son responsables de la contaminación del raudal. Dijo que, si bien, considera que todas las fuentes de polución deben ser clausuradas, recalcó que esa no es una decisión que pueda tomar el gobierno estatal, pues no está dentro de sus atribuciones.
TLAXCALA DEBE COOPERAR PARA SANEAR EL RÍO
A propósito, apuntó que la Comisión Nacional del Agua (Conagua) es la dependencia a la que corresponde la verificación de estos espacios, no obstante, criticó que la misma “no tiene una definición clara”.
Aunado a ello, hizo hincapié en que el Río Atoyac es un cuerpo hídrico interestatal, por lo tanto también corresponde al gobierno del estado de Tlaxcala cooperar para su recuperación. Al respecto, mencionó que en el pasado se hizo el planteamiento a la entidad vecina para colaborar en ese sentido, sin embargo, “tampoco asumió esa posición”.
Por último, revivió la propuesta para que su homóloga tlaxcalteca, Lorena Cuéllar Cisnetos, se una a un compromiso bipartita que tenga como foco la creación de un fondo con recursos provenientes de ambas entidades y que con ello sea posible conformar un plan real de saneamiento del afluente.