Los liderazgos más representativos del PRI, exdirigentesestatales, un ex gobernador y hasta los críticos al interior delpartido cerraron filas para mantener a Jorge Estefan Chidiac yRocío García Olmedo en la dirigencia estatal del partido,después de que todos consideraron que la renovación del ComitéDirectivo Estatal (CDE) no es un tema que esté a discusión en elRevolucionario Institucional.
Incluso los que pidieron su renuncia después de la derrotaelectoral del pasado 5 de junio, como el delegado del InstitutoMexicano del Seguro Social (IMSS), Enrique Doger Guerrero y eldelegado de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), JuanManuel Vega Rayet, cambiaron el discurso y dejaron de pedir ladestitución del dirigente y la Secretaria General.
Una reunión privada entre estos dos activos del partido bastópara que ambos apagaran la solicitud de cambio en el CDE que ellosmismos comenzaron.
“No es un análisis simple quitar o poner a tal o cualdirigencia. Fortalecer al partido es lo que debemos hacer”, dijoDoger Guerrero, quien reconoció que pidió su renuncia.
“Sí, señalé que igual que cómo lo hizo Beltrones deberíanhacerlo las dirigencias, no sólo de Puebla, sino de los estados endonde se perdieron, pero va más allá de eso, no es quitar o ponera un dirigente, primero habrá que esperar cómo se resuelve ladirigencia nacional”.