El “Padre nuestro” quiso contrarrestar el vandalismo que a su paso dejó la llamada “Marcha de las putas".
Por primera vez en Puebla, los religiosos hicieron un cinturón de seguridad para evitar el daño de templos, iglesias y otros inmuebles en el Centro Histórico de Puebla durante la manifestación de esta tarde en la que ambos grupos se enfrentaron, unos con rezos (los católicos) y otros con gritos (las feministas).
Así las plegarias de un grupo de católicos se perdían en el torbellino de los tambores de las representantes de ola verde, cuyo movimiento demanda el aborto.
El primer encuentro entre las letanías del rosario y las consigas pro aborto fue en el templo de San Cristóbal (Reforma y 9 Norte), donde no hubo ninguna agresión física sino sólo discusiones verbales.
Los cánticos religiosos se perdían entre las mujeres desnudas que llenaron sus cuerpos de diversas pintas y consignas que las convirtieron prácticamente en pliegos petitorios andantes que criticaban las recién aprobada leyes de aborto y matrimonios igualitarios en el Congreso de Puebla.
Mientras, católicos pedían respeto a la que llaman la Casa de Dios, luego de que fuera vandalizada en los más recientes movimientos sociales.
Este encuentro fue más tenso en la Catedral, pues en el atrio, un grupo de religiosos se hincó y elevó fuertemente sus plegarias. Mientras, las mujeres burlaban los cinturones humanos para bailar frente a las rejas del templo máximo de los católicos.
“Somos malas podemos ser peores, y al que no le guste se jode”, “Aborto sí, aborto no, eso lo decido yo”, “Que nos detengan que somos abortistas, malvadas feministas y no nos van a controlar”, eran las exclamaciones efusivas de las mujeres que protestaban.
Los católicos cerraron los ojos y no dejaban de rezar: “Santa María madre de dios, ruega por nosotros los pecadores”, “Padre nuestro líbranos de todo mal”, “Dios te salve María, llena eres de gracia”. Incluso en algún momento enseñaron en defensa su rosario.
Nos organizamos para defender la casa de Dios, es una ofensa para la casa de Dios que se pinte. Nosotros defendemos la vida y pedimos respeto. Hoy nos reunimos evangelizadores de diversos sectores, dijo un católico del sector Oblato.
La “Marcha de las Putas” es un movimiento internacional, que nació en Canadá y que en un principio pedía terminar con la violencia de género.
En Puebla, la movilización fue liderada por un grupo de mujeres enmascaradas que danzó, gritó e hizo pintas en inmuebles del Centro Histórico, principalmente en el Congreso Local.
Las mujeres realizaron un festival de canto y batucada en la plancha del zócalo, donde la Comuna autorizó colocar un templete.
Ahí, las organizadoras denunciaron que en la entidad ha crecido la violencia en contra de las mujeres y que se encuentra en primer lugar nacional con menores de edad desaparecidas.
Mientras, sobre el aborto, informaron que actualmente existen 73 mujeres en proceso de investigación y que 11 están detenidas por este delito, por lo que criticaron que los diputados locales (de mayoría de izquierda) solo redujeran las penas y no legislaran por la despenalización.