La Reserva de la Biósfera Tehuacán-Cuicatlán guarda alrededor de 2 mil 700 especies de flora, algunas de ellas sirven para fines medicinales y otras como alimento de las comunidades que, en parte, se oponen al nombramiento de la UNESCO como Patrimonio Mixto de la Humanidad.
Maurino Reyes Castillo es guía de turistas en el Jardín Botánico “Helia Bravo Hollis”, que desde hace 30 años nació con fines de investigación científica y hoy da empleo a los habitantes del municipio a través de las cuotas que recibe de los turistas.
Su trabajo es mostrar la riqueza biológica de la región. En sus cerca de 100 hectáreas el jardín tiene varias especies endémicas y otras más que se encuentran en toda la extensión de la Reserva: poco más 490 mil hectáreas entre Puebla y Oaxaca. Y, pese a que el nombramiento podría ser una oportunidad para atraer más turismo, existen opositores del proyecto.
La Reserva de la Biósfera Tehuacán-Cuicatlán es, por segunda ocasión, candidata (de 30 nominaciones) para ser nombrada Patrimonio Mundial en la categoría de “Sitio Mixto” por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO, por sus siglas en inglés). En los próximos días, en la 42 Reunión del Comité, que se realizará en Manama, Baréin, se decidirá.
El municipio cuenta con alrededor de 24 mil hectáreas de superficie de la Biósfera, que representa el 4.8 por ciento del total; sin embargo, ahí existen actividades económicas que sustentan a una buena parte de los habitantes, como la explotación de ónix o la producción de sal.
Según comentó Jessica Cid, habitante del lugar, los opositores temen que, una vez nombrada la Reserva Patrimonio por la UNESCO, ya no dejen a la gente hacer uso de los recursos naturales existentes, sobre todo, producir artefactos de ónix. De hecho, en ese municipio una buena parte de los negocios que existen son de venta de productos elaborados con dicho material. Lámparas, mesas, artículos decorativos, entre otros.
El mismo guía de turistas explicó que existe un conflicto con los comuneros porque saben que una vez que la Reserva tenga el nombramiento no permitirán hacer nuevas canteras para sacar el mineral y tampoco hacer nuevas “salineras”, por lo que la mayoría no ve el nombramiento con buenos ojos.
Reprochó que los tres niveles de gobierno hayan dejado solos a los habitantes de los municipios que conforman la Reserva, porque no han enseñado cómo explotar de buena forma los recursos naturales existentes; sin embargo, Rosa de la Aurora Pérez, habitante de Zapotitlán, destacó que el nombramiento puede ser benéfico, porque habrá mucho más turismo. Consideró que la gente que se opone no quiere dejar de sobreexplotar los recursos naturales, porque puede haber producción sin el deterioro de la flora o la fauna. Cabe destacar que esta última asciende a alrededor de 300 especies.
LA RESERVA
En el reino de cactáceas se encuentran, por lo menos, 50 por ciento de las especies de tipo columna en México y los bosques más completos están en la parte de Puebla, dijo Reyes. El jardín exhibe alrededor de 27 especies de cactus que crecen dentro de la Reserva, misma que guarda felinos como el puma o el jaguar, además del águila real y la guacamaya verde.
“Doce por ciento, de las cerca de 3 mil plantas, son endémicas; 87 especies, reptiles; 105 conforman mamíferos y hay cerca de 300 especies de aves”, comentó.
Parte de la riqueza de la zona es, además, la cercanía con la Presa Purrón, la cual edificaron los popolocas y donde se cree que fue la cuna de la agricultura en Mesoamérica, pero también se encuentra San Juan Raya, que tiene fósiles conservados de millones de años porque, además, se sabe que la zona pudo haber sido mar en algún momento de la historia del mundo.
LA EXTENSIÓN
En mayo de 1999 a través del Diario Oficial de la Federación (DOF) se publicó el decreto por el que se declaró Área Natural Protegida (ANP), con carácter de Biósfera, a la región denominada Tehuacán-Cuicatlán, ubicada en los estados de Oaxaca y Puebla.
Ajalpan, Atexcal, Caltepec, Cañada de Morelos, Chapulco, Coyomeapan, Zinacatepec, Juan N. Méndez, Totoltepec de Guerrero, Palmar de Bravo, Tecamachalco, Yehualtepec, Tlacoltepec de Benito Juárez, Tepanco de López, Santiago Miahuatlán, Coxcatlán, San Gabriel Chilac, San José Miahuatlán, Tehuacán y Zapotitlán son los municipios que conforman la Reserva, además de 31 del vecino estado, 51 en total.
Los pobladores saben que en la Reserva existen plantas que sirven para controlar la glucosa, para sanar enfermedades de las encías, para aliviar la congestión pulmonar; aunque otras más se comen, como las tetechas, el garambullo o los cuchamá, y su uso ha sido aprendido de generación en generación, por lo cual algunos pobladores temen no poder seguir usando los cactus.