La Secretaría de Educación Pública (SEP) del Estado de Puebla, durante el liderazgo de Melitón Lozano, destinó más de 2.7 millones de pesos de recursos federales para pagar nómina de maestros muertos, dados de baja o que se reportaron inactivos durante el segundo año de la pandemia por coronavirus, según detectó la Auditoría Superior de la Federación (ASF).
Estos pagos irregulares fueron hallados en auditorías realizadas al Fondo de Aportaciones para la Nómina Educativa y Gasto Operativo (FONE) correspondiente a 2021, por lo que la dependencia fue obligada a reintegrarlos a la Tesorería de la Federación.
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La ASF también determinó 24.3 millones de pesos pendientes por aclarar, derivados de pagos realizados a trabajadores que estuvieron adscritos en seis centros de trabajo y desempeñaron actividades distintas a la educación básica y normal.
En el primer caso, los recursos analizados del FONE corresponden a partidas identificadas como “nómina estatal” y “nómina federal”. La Auditoría detectó que se realizaron pagos por 455.5 mil pesos a trabajadores fallecidos de la nómina estatal, así como pagos por 436.3 mil pesos a trabajadores después de la fecha de baja definitiva.
En el caso de la nómina federal, se observaron pagos por un millón 325.2 mil pesos a trabajadores muertos, además de pagos por 696.9 mil pesos a trabajadores después de la fecha de baja definitiva.
Mientras que por gastos de operación se observaron 483.6 mil pesos. Estos montos fueron reintegrados a la Tesorería de la Federación por un total de 11 millones 859.6 mil pesos.
De los 24 millones 358 mil 774 pesos pendientes de aclarar, la ASF encontró que el recurso fue para pagar a 66 trabajadores que contaron con 68 plazas y estuvieron adscritos en seis centros de trabajo, en los cuales se realizaron actividades distintas a la educación básica y normal.
El análisis dicta que se realizaron mil 332 pagos por 21 millones 836 mil pesos a 69 funcionarios con los cargos de secretario, subsecretario, oficial mayor y directores generales u homólogos durante el ejercicio fiscal 2021, que contaron con 56 plazas y estuvieron adscritos en 22 centros de trabajo.El monto restante derivó de pagos a trabajadores que no fueron solventados.
Al no haberse solventado en su totalidad las observaciones por pagos realizados con los recursos del FONE, la ASF determinó un probable daño o perjuicio a la Hacienda Pública Federal.
