Durante su participación como ponente en la XII edición de la Ciudad de las Ideas, Rigoberta Menchú, líder indígena guatemalteca y Premio Nobel de la Paz, indicó que es importante que el ser humano no olvide su esencia, por lo que consideró primordial cuidar la salud espiritual y mental, toda vez que la mayoría de las ocasiones la humanidad se preocupa más por el aspecto material.
Durante su ponencia, se dirigió principalmente a los jóvenes a quienes les recordó que “ser genio no es renunciar a su ser”, por el contrario, enfatizó sobre el hecho de que los jóvenes pueden ser genios haciendo lo que más les hace feliz.
“Es simplemente saber vivir la vida desde el comienzo y hasta el final de nuestro tránsito por este mundo”, mencionó.
Agregó que la ciencia es prueba de la grandeza humana y destacó que en conjunto con la tecnología estas deben ser consideradas como patrimonio universal y colectivo: “la ciencia tecnológica tiene que estar al servicio de la ciencia social, sin importar la vocación”.
Del mismo modo reiteró la importancia de dejar una huella positiva en la sociedad mediante los aportes que cada uno hace desde su trinchera, no obstante, pidió no olvidar que la única cosa que tenemos que cuidar según los mayas y los ancestros, es nuestro sentir, “el sentimiento no se puede reemplazar”, compartió.