Integrantes de la Unificación de Sexoservidoras de Puebla sostuvieron la primera reunión formal con actuales autoridades del municipio para exponer su problemática en la que insistieron en contar con una zona de tolerancia, con la finalidad de sentirse más seguras o protegidas para ejercer la profesión.
A la vez, reconocieron que después de la denuncia pública realizada en octubre de 2018, disminuyó la extorsión y petición de favores sexuales a cargo de policías municipales, pero está latente ese tipo de prácticas por algunos elementos.
Un grupo de mujeres acudió este viernes a Palacio Municipal a dialogar con Catalina Pérez Osorio, secretaria de Igualdad de Género, con el propósito de establecer trabajo coordinado conforme a sus diversas necesidades.
Entrevistadas al salir del encuentro, unas explicaron que mantienen su postura de solicitar la creación de una zona de tolerancia, analizando diversas zonas de la ciudad, como, por ejemplo, los límites territoriales de Puebla con Tlaxcala o San Pedro Cholula.
“La petición fue que se nos escuchara y sostuvimos una primera plática que nos ayudó el regidor Roberto Esponda, esperamos que existan otras más en las siguientes semanas”, señaló una de las entrevistas sin dar su nombre.
Las trabajadoras sexuales solicitaron básicamente termine el acoso por parte de los policías municipales que les piden dinero o sexo a cambio de no ser detenidas por laborar en la vía pública.
“El acoso ha disminuido, pero siempre está latente, si estamos en la calle es porque nos vemos obligadas por necesidad para mantener a nuestras familias, la mayoría somos madres solteras o separadas que debemos mantener hijos”, expuso a manera de queja otra de las asistentes al encuentro con la autoridad municipal.
Otras más, confiaron que el ayuntamiento analice la petición de contar en Puebla con una zona de tolerancia, con la finalidad de ya no satanizar a las mujeres que laboran en calles del Centro Histórico y otros puntos de la ciudad.
Afirmaron que han retomado propuestas del pasado como los límites de Tlaxcala y San Pedro Cholula, aunque se negaron a precisar ubicación para no caer en el terreno de las especulaciones.
Finalmente, acordaron una nueva reunión con la autoridad municipal en fecha por definir.