Las secretarias conforman el poder efectivo en el corazón de las grandes compañías. Son personas que trabajan a la sombra de los altos ejecutivos, controlan la agenda de los altos mandos y son testigos de grandes operaciones y tomas de decisiones… ¡es más! A veces saben más del negocio que muchos ejecutivos y la discreción es su máximo mandamiento.
Las notas mecanografiadas, el uso de la taquigrafía en los dictados era la herramienta básica de las secretarias; ambos se ofrecían en plan escolar de las secundarias. Decenas de estudiantes cargaban con sus máquinas de escribir para aprobar la materia, incluso, era requisito demostrar la capacidad de tomar un dictado sin ver las teclas y usando los 10 dedos de las manos.
En los años ochenta y hasta un poco los noventa, cientos de cursos se ofrecían en diversas academias para profesionalizar a estas mujeres que tenían en sus manos la agenda del jefe y que resaltaba la importancia de una buena presentación, tomar dictado de forma rápida y pulcra, además de escribir a máquina sin errores y en la misma hoja, es decir, sin necesidad de rehacer el trabajo.
Empero, la atención de llamadas y anotar citas quedaron en el olvido para las secretarias de hoy en día, en la actualidad se enfrentan a retos que quizás años atrás jamás se imaginarían.
Hace apenas dos décadas las secretarias vivían en una situación de aislamiento casi total. No podían despegarse de su escritorio para evitar que una llamada importante se perdiera, y siempre se desplazaban donde estuviese el jefe, pero los avances tecnológicos han cambiado por completo estas dinámicas. Ahora, ellas usan la computadora, tabletas, teléfonos celulares y han echado manos de las aplicaciones para complementar su trabajo.
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Ahora trabajan mucho más en equipo, coordinan reuniones, visitas y presentaciones, organizan y resuelven casos durante la ausencia de los directivos. Con la llegada de redes sociales, los jefes echan mano de ellas para manejar redes sociales como Twitter y Facebook, dos herramientas fundamentales para cualquier corporativo.
Desde hace casi 25 años, Ariadna Olivia Arzate Valdés se ha dedicado a ejercer dicha profesión, y en su paso por tres diferentes y grandes empresas ha experimentado un cambio en la forma de trabajar. “Yo cuando salí de estudiar la carrera técnica de la Comercial Inglesa, todavía se usaba la mecanografía y la taquigrafía, y en ese entonces no te podías equivocar al hacer un oficio porque tenías que iniciar de cero, no es como ahora en la actualidad que ya lo haces todo por la computadora”, confiesa. Asimismo, asegura que la llegada del internet y de aparatos electrónicos como las computadoras y los teléfonos inteligentes, sirven de apoyo para desempeñar su labor, sin embargo, espera que estas tecnologías no las llegue a desplazar.
LA TECNOLOGÍA ¿PODRÍA EXTINGUIRLAS?
Es cierto que los avances tecnológicos han sido de gran ayuda para quienes desempeñan dicha función, sin embargo, también tienen su lado B, y la amenaza para las secretarias hoy en día se llama “Smartphone”.
Como ocurre con otras profesiones, la llegada de la tecnología tiene un impacto disruptivo, ya que muchos jefes pueden realizar sus propias actividades para ahorrar tiempo y sobre todo para asegurarse de una mayor privacidad, cometidos que antes quedaban en manos de las asistentes. Ahora los teléfonos celulares permiten autogestionarse desde el correo, hasta el cierre de citas en la agenda. Será que con el tiempo ¿pueda desplazarse esta figura?
De acuerdo con Anselmo Salvador Chávez, profesor e investigador de la facultad de Contaduría de la Escuela de Negocios de Upaep comenta que en un corto plazo no podrían desaparecer, aún, pero si es una profesión que tendrá que reevaluar los esquemas de habilidades para generar y trabajar con el uso de la tecnología.
Lo que es cierto, de acuerdo a la experiencia de Chávez y de Arzate, es la reducción de personal para este gremio, es decir, antes se usaban dos o incluso hasta tres secretarias para una empresa o un solo departamento, pero con el avance tecnológico, la creación de oficinas virtuales y la contratación de profesionistas, han sustituido a este tipo de personal por asistentes administrativos.
“Creo que la función de apoyo secretarial todavía en el corto plazo no se va a ver afectado, pero de aquí a 20 años, probablemente sea uno de los puestos de trabajo que mayor riesgo de desaparecer tendrán dentro de las organizaciones”, comenta el catedrático, luego de añadir que su labor es indispensable en este momento en las empresas, ya que su apoyo es imprescindible para la armonía en la organización, ya que ellas son las encargadas de hacer un entorno de trabajo agradable, a través del trabajo en equipo y promover la buena convivencia.
Por su parte, Ariadna Olivia, quien actualmente funge como secretaria ejecutiva en la facultad de Ciencias Biológicas de la BUAP, añade que la labor de una secretaria, independientemente de la preparación académica o de la actualización constante, se enfoca más en la habilidad de resolver problemas en el menor tiempo posible. “Sinceramente no creo que desaparezca porque pues realmente eres el brazo derecho, tanto de tu jefe como de una empresa, entonces él se puede ir de viaje y la responsabilidad cae sobre ti y tú tienes que resolver todo en cuanto él no está”, finaliza, acción que ningún móvil o computadora pueda hacer…al menos hasta estos días.
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