Inseguridad, invasión de espacios públicos y hasta poca recaudación de impuestos es lo que desencadenará el desbordamiento del ambulantaje en la capital poblana si no se frena o se ordena, advierten las y los poblanos.

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Si bien en el Centro Histórico de Puebla el número del comercio informal se redujo, en la periferia de la ciudad fue todo lo contrario, ya que no solo se pueden observar puestos de diversos productos, sino ahora también hay estructuras fijas en áreas públicas y hasta carritos de comida.

No solo los colonos señalan lo anterior, sino que el profesor de la licenciatura en Administración Financiera y Bursátil de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), Anselmo Chávez Capó, concuerda con ello.

Refirió que la informalidad no solo abre las puertas para que cada vez sean más personas las que se dediquen al ambulantaje, ya que al no haber una normativa que los regule es fácil que se dediquen a la venta de comida, bebidas alcohólicas y productos chinos.

Precisó que con ello la recaudación de los impuestos será menor, debido a que no tienen que pagar un permiso al ayuntamiento o el espacio en donde se instalan. Además, al vender artículos extranjeros se permite que las tiendas asiáticas invadan la capital.

También, comentó que el comercio informal fomenta el robo a vehículos de carga, ya que cuando las bandas criminales asaltan a automotores con mercancía posteriormente la venden a un menor precio y es así como en algunos casos llega a los ambulantes, quienes dan precios bajos.

“El comercio ambulante genera sus propios ingresos, pero a través de la apropiación de espacios que no son suyos. Las nuevas autoridades tienen que revisar esta forma de vender y no solo eso, sino que al igual se debe verificar el funcionamiento de las cadenas chinas, pues es ahí donde compran sus productos los ambulantes”, expresó.

Puestos y hasta carritos de comida proliferan en la capital

Es en zonas como La Margarita, la 11 Sur, Los Héroes y hasta Ciudad Universitaria donde ahora existen vendedores ambulantes, lo que dificulta no solo el tránsito vehicular, sino también el peatonal sin que la autoridad municipal que estaba en funciones hiciera algo al respecto. Este será uno de los retos que tendrá que enfrentar el alcalde José Chedraui Budib.

No es difícil de identificar este tipo de comercio al transitar por el municipio y más en la zona Sur, donde proliferan los vendedores, quienes se han apropiado del espacio público y se instalan desde tempranas horas para poder comercializar sus productos.

Es la 11 Sur desde la calle Lotos hasta la calle Cerezos donde se coloca el ya conocido tianguis de La Curva en San Ramón en el que el número de los puestos creció, puesto que no solo se vende comida, ropa, productos de limpieza y verduras, sino que ahora se colocan pequeños bazares de ropa, herramientas y más.

La banqueta ha quedado bloqueada, ya que es justo en dicho espacio donde se instalan los ambulantes y quienes quieran caminar por la zona deben pasar entre las carpas de los comerciantes, caminar sobre la carretera o cruzar la calle, aunque también ahí ya hay algunos comerciantes informales.

Incluso en este sitio el carril con dirección a la junta auxiliar de San Andrés Azumiatla se ha reducido, ya que los ambulantes colocan camionetas y coches en la vialidad para descargar su mercancía o vender desde estos.

Sobre este punto, Ana Laura, vecina de la colonia mencionó que el número de puestos ha traído inseguridad, pues los ladrones se esconden entre las lonas de los comerciantes y ha oído que se comercializan sustancias nocivas para la salud, por ello es que apuntó que la autoridad debe controlar esta situación, porque aunque parezca algo inofensivo no es así.

“Se sabe que en este punto no solo venden productos para el hogar o comida, también drogas y si esto no se detiene, poco a poco se va a crear un nido de narcomenudistas. Es un tema que sí debe atenderse ya”, opinó.

Asimismo, en la Avenida Fidel Velázquez desde la 24 Sur ha incrementado el número de ambulantes, puesto que ahora ya no solo se concentran frente al Hospital General de Zona No.20 conocido como el de La Margarita perteneciente al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), sino que ahora también han invadido otras áreas.

El problema es el mismo que el de San Ramón, puesto que sus lonas, mesas, carpas y demás objetos invaden las banquetas destinadas para los peatones, a quienes ahora se les dificulta el paso.

Los puestos de cemitas, memelas, ropa, verdura, cubrebocas, licuados y más se pueden ver desde la calle 24 Sur hasta el Bulevar Municipio Libre. Ahí es notable el desbordamiento de ambulantaje, ya que anteriormente no había tantos puestos, debido a que estos estaban frente al nosocomio y una tienda Coppel.

Con esta situación según relataron vecinos de la zona, quienes prefirieron el anonimato, no solo se invaden áreas públicas, sino que también existe un riesgo para los peatones, quienes tienen que cruzar por la carretera, ya que las aceras están ocupadas.

Además, indicaron que las personas con alguna discapacidad tienen más complicaciones para transitar. Por ello, urgieron que ante una nueva administración municipal se retiren los puestos de quienes solo generan caos en la ciudad.

Otro punto que también ha sido invadido sin limitantes es en Bosques Héroes Puebla, ahí se colocan carritos de comida, los que obstruyen banquetas y las vialidades.

Es en la calle 16 Sur donde los camiones se han instalado en ambos sentidos y venden tacos de carne asada, hamburguesas, hot dogs y más, pero solo en las noches, sin embargo, durante el día estos ocupan el espacio público. Esta práctica se ha vuelto algo común.

También en Los Héroes Segunda Sección sobre la Diagonal 18 Sur los ambulantes se han adueñado de las banquetas, puesto que han colocado de forma permanente estructuras metálicas y techados para su instalación, al circular por ahí es posible observar los puestos uno tras otro.

Han invadido áreas verdes y el paso de peatones, lo que permite que los vendedores puedan continuar con la apropiación de dichos espacios.

Al igual, en la zona de Ciudad Universitaria se observan puestos y carritos de comida, debido a que es un lugar con mucha afluencia por el número de estudiantes que acude a esta casa de estudios.

Sobre el tema el entonces secretario de Gobernación Municipal, Arturo Cruz Lepe, indicó en varias ocasiones que el ambulantaje en la periferia es complicado, ya que es itinerante, puesto que hay quienes se colocan unos días en un lugar y luego son otras personas.

Mientras que en el Código Reglamentario para el Municipio de Puebla (Coremun) se establece que sí se pueden permitir los puestos ambulantes, pero no determina un número mínimo ni máximo.