A dos años y medio de que el Congreso del Estado prohibió las bolsas de plástico y popotes de un solo uso, la ciudadanía tomó mayor conciencia y los grandes negocios acataron la medida, sin embargo, la pandemia por Covid-19 incrementó la utilización del plástico por la compra de productos de higiene y protección.
Raciel Flores Quijano, director del Área de Química de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (Upaep), señala que esta medida iba a implementarse a mediados de 2020, pero la contingencia frenó su aplicación.
Pese a ello, los supermercados, las tiendas departamentales o de conveniencia acataron la disposición y dejaron de utilizar bolsas de plástico desechables para entregar la mercancía a sus clientes y en su lugar ofrecen bolsas sustentables.
Sin embargo, estos objetos aún son utilizados para la basura de los hogares, por lo cual el experto sugiere que con la nueva normalidad los gobiernos implementen campañas en redes sociales para recordar a la ciudadanía que la prohibición existe y que esta permitirá evitar mayores problemas de contaminación.
“La ciudadanía está consciente de esa disposición solo hace falta reforzarla para que la apliquemos al 100 por ciento. Aunque esas bolsas eran útiles para recolectar nuestros residuos, hay otras formas para hacer el acopio”, dice.
Flores Quijano señala que a nivel doméstico el uso del plástico aumentó por la compra de caretas y otros productos para protegerse de la Covid-19, en el entendido de que los desechos llegan al relleno sanitario y no se tiran en la calle.
“La gente está consciente, incluso los centros comerciales ya retiraron totalmente los popotes y las bolsas de plástico (de un solo uso). La forma más efectiva para llegar a la gente es a través de las redes sociales, no parece ser tan complicado, con spots rápidos la ciudadanía recordaremos la utilidad o las bondades del legislador para tratar de reducir el problema de contaminación”, agrega.
¿CÓMO SE ADAPTAN LOS NEGOCIOS?
Aunque los supermercados, las tiendas departamentales o de conveniencia dejaron las bolsas de un solo uso, en algunas “tienditas” aún las entregan como se pudo observar en un recorrido por las calles del centro de la ciudad.
En otros casos como los vendedores de tamales, han optado por las bolsas biodegradables cuyo material puede descomponerse en la naturaleza.
Algunas panaderías prefieren las bolsas de papel o que los compradores lleven su recipiente. En el caso de los restaurantes, las fondas o negocios de comida muchos dejaron estos objetos, pero entregan la comida en recipientes de unicel. Otros establecimientos piden a la clientela llevar portaviandas.
En las aplicaciones móviles como Uber Eats o Didi Food es común observar que algunos negocios entregan los alimentos en contenedores de unicel y bolsas de plástico, otros son más responsables y ocupan bolsas de papel o biodegradables.
PROHIBIDO DESDE 2019
Esta prohibición fue avalada el 15 de mayo de 2019 por la LX Legislatura del Congreso del Estado que reformó la Ley para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos Sólidos Urbanos y de Manejo Especial para el Estado de Puebla.
Desde entonces los establecimientos ya no pueden usar ni entregar bolsas de plástico a título gratuito u oneroso para transportación, carga o traslado de productos o mercancías en el estado de Puebla, excluyendo de esta medida los popotes que se emplean en hospitales o por cuestiones médicas.
Aunque los ayuntamientos tuvieron un periodo de gracia no mayor a seis meses para que emitieran sus reglamentos y programas municipales con el fin de evitar sanciones, la pandemia frenó los operativos para supervisar el cumplimiento de esta disposición, los cuales no se han retomado en lo que va del año.
El artículo 40 Bis señala que los establecimientos deberán incentivar y brindar facilidades a los consumidores para llevar sus propias bolsas reutilizables o bien otros elementos que no sean de un solo uso, estando permitidas las bolsas de tela, canastas, redes u otras hechas de material reutilizable, para fines de envoltura, transportación, carga o traslado de productos o mercancías.
“Quedan excluidas de esta prohibición aquéllas que se empleen por razones de higiene, salud o conservación de alimentos siempre y cuando sean hechas de material cien por ciento reciclable”, se lee en la normativa local.
La ley señala que la Secretaría de Medio Ambiente, Desarrollo Sustentable y Ordenamiento Territorial “emprenderá esfuerzos mediante campañas de difusión, actividades de educación ambiental y capacitación y otras similares; para generar conciencia en la población de los efectos perjudiciales en el ambiente que produce el uso de bolsas plásticas y popotes derivados de combustibles fósiles; así como promover la investigación y desarrollo de materiales reutilizables y alternativas, convenios de cooperación con establecimientos para incentivar el uso de bolsas reutilizables y de la necesidad de eliminar el uso de plásticos de un sólo uso”.