A pesar de que el Código Penal de Puebla señala que la falsificación de documentos oficiales está penada con ocho años de prisión y hasta con 207 mil pesos de multa, a la fecha se siguen registrando casos de clonación de placas, expedición de tarjetas de circulación, pedimentos y refacturaciones falsas, documentos que se expiden a través de presuntos gestores vehiculares que operan bajo la ilegalidad.
Basta con entrar a redes sociales para confirmar la existencia de más de 100 usuarios que ofertan este tipo de trámites, que presuntamente “garantizan” a los interesados que la placa y los documentos (con logos del gobierno del estado) “quedarán registrados ante el sistema”.
Tan solo en Facebook, al momento de buscar la palabra “placas”, la aplicación lanza una advertencia en la que describe de manera textual que el término que se está buscando “en ocasiones se asocia con actividad fraudulenta” y que si se detecta esto o incumplimiento con las reglas comunitarias, se deberá reportar el contenido.
Aun con ello, en Marketplace se pueden encontrar diversas cuentas y grupos bajo los nombres de “Gestoría vehicular”, “Placas de Puebla y Tlaxcala”, “Placas, verificaciones y licencias”, “Emplaca tu auto”, “Trámites de licencias y placas”, “Emplaca fácil” y “Placas seguras”, mediante las cuales atraen a las personas.
Incluso, para generar cierto sentido de confianza, algunas cuentas se promocionan utilizando los logos de la Secretaría de Planeación y Finanzas (SPF) del gobierno del estado para motivar a que más internautas acepten la presunta gestoría, la cual conlleva una serie de riesgos para los propietarios de vehículos, ya que el uso de placas clonadas implica falsificar y manipular documentos oficiales, lo cual es considerado un delito.
Sin embargo, el propósito principal de esta dinámica es evadir la ley y eludir las responsabilidades legales y económicas que conlleva la propiedad y la utilización de un vehículo, que, por un lado, hay quienes lo hacen de manera consciente para cometer otros delitos, mientras que, por otro lado, hay quienes lo hacen para agilizar la expedición de su documentación vehicular, sin saber que pueden estar afectando a terceras personas y volverse cómplices de este tipo de métodos ilegales.
Aun bajo este contexto, cientos de usuarios escriben en estos grupos para solicitar información sobre los trámites y costos de estos documentos, que se elaboran con materiales similares a los originales.
Tener placas sobrepuestas promueve otro tipo de delitos
Uno de los peligros más evidentes de la clonación de placas es el uso indebido de las mismas para cometer actos criminales. Los delincuentes pueden utilizar vehículos robados con placas clonadas para perpetrar asaltos, secuestros y otros delitos, aprovechándose de la confusión que genera la falsa identificación del vehículo.
En este sentido, es importante destacar que Puebla cerró el 2022 con el tercer lugar a nivel nacional con el mayor número de robos de vehículos, con un total de 5 mil 728, dato que resulta preocupante. De acuerdo con el reporte histórico del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), reveló que al cierre del 2015 se reportaron 2 mil 937 unidades robadas; al cierre del 2016, 4 mil 532; en 2017, 10 mil 072; en 2018, 12 mil 512; mientras que, en el 2019, el robo de vehículos fue de 11 mil 531.
En esta misma línea, la incidencia delincuencial en 2020 sobre el robo unidades de cuatro ruedas fue de 8 mil 159; al cierre del 2021 fue de 6 mil 184; en 2022 el reporte fue de 5 mil 728; y en lo que va de enero a mayo de 2023, el número de unidades robadas es de 2 mil 371.
A pesar de que en algunos casos los delincuentes optan por desvalijar las unidades robadas, en otros escenarios las ponen a la venta con placas y documentación falsa, tal y como las que se promueven en lugares no autorizados.
Código Penal de Puebla señala como delito la falsificación de documentos
En este sentido, Tomás Romero Martínez, experto en temas legales, destacó que el artículo 253 Bis del Código Penal de Puebla señala de manera textual que “al que elabore o altere sin permiso de la autoridad competente, una placa, engomado, tarjeta de circulación o demás documentos que se expiden para identificar vehículos automotores o remolques, se le impondrá de cuatro a ocho años de prisión y multa de trescientos a dos mil días de salario mínimo”.
Bajo este escenario explicó que otro riesgo importante de la clonación de placas es el perjuicio que causa a los propietarios de vehículos legítimos. Cuando se clona una placa, el vehículo duplicado adquiere una identidad falsa, lo que puede implicar que se generen multas de tránsito, infracciones o incluso cargos penales en nombre del propietario legítimo.
Esto, agregó, no solo puede afectar su historial de manejo, sino también generar complicaciones legales y administrativas que requieren tiempo y recursos para resolverlas, en caso de que se cometa otro tipo de delito.
“El propietario legítimo tendrá que ser llamado a testificar porque van a aparecer los datos de su placa y tendrá que comparecer (…) En caso de ser víctima de una clonación, la persona deberá acudir al Ministerio Público para abrir una carpeta de investigación que permita esclarecer quién clonó nuestra placa y que está causando un detrimento al patrimonio para incumplir con los reglamentos viables”, indicó.
Detectó la clonación de su placa mediente fotomultas
Uno de los casos más recientes fue el de Karla Polo González, quien fue víctima de este modus operandi en la capital poblana. En entrevista con El Sol de Puebla compartió que, en mayo de 2022, adquirió un vehículo nuevo, marca MG5 Sedán, mismo que se convirtió en su medio de transporte para dirigirse a su trabajo.
Cinco meses después, al revisar el estatus de su unidad, se percató que tenía al menos siete fotomultas en zonas y horarios en los que no transita, hecho que le generó alerta. “A finales de octubre yo entré al portal para verificar mis fotomultas y cuando veo, debía más de 7 mil pesos. Sin embargo, me di cuenta de que algo estaba mal porque estas eran en horarios en los que estoy trabajando y en una vialidad que está del otro lado de la ciudad, de donde yo vivo y de donde yo trabajo”, compartió.
Al seguir investigando se percató que el modelo y color no coincidía con su auto, ya que la imagen que aparece en la página de las fotomultas es la de una camioneta Captiva del año, cuando su auto es un sedán.
“Fui a la Fiscalía porque, a toda vista, esto es un delito. Ahí me dijeron que no podía levantar una denuncia, que solamente podía levantar un acta de hechos porque no me habían robado nada, y en caso de que la persona que está usurpando mi número de placas cometiera algún delito y me detuvieran, con la carta de hechos me podía defender”, comentó.
Recibió documentación falsa
Tras darse a conocer este hecho, más personas reportaron a esta casa editorial que no se trataba de un caso aislado, pues incluso señalaron la existencia de diversos locales en los que se expiden placas y licencias para automovilistas y motociclistas, licencias permanentes y federales, así como permisos de conducir para menores de edad.
De acuerdo con los reportes recibidos en El Sol de Puebla, los ciudadanos señalaron algunos locales que operan por algunas temporadas para pasar desapercibidos, sin embargo, la mayoría coincidió en un local ubicado en el Boulevard Margaritas, a la altura de la calle 27 de Septiembre, colonia La Carmelita.
Uno de los casos es el de José (quien solicitó guardar su identidad), quien en entrevista con este medio compartió que a través de Facebook contactó a una tramitadora denominada TramiTex, que se encarga de gestionar este tipo de documentación. El anuncio de la red social indicaba que el trámite de su placa sería “ágil”, “sin filas” y “seguro”.
Con la intención de ahorrar tiempo y no ausentarse de su trabajo, José consideró que sería buena idea hacer el trámite de su licencia de conducir a través de esta agencia. Al contactarlos, le compartieron un número de WhatsApp mediante el cual empezaron el diálogo y concretaron una cita en “las oficinas”.
Al llegar al lugar, no sintió mucha confianza debido a que la fachada no está rotulada y, como tal, no es una oficina en forma, sin embargo, estando en el punto, aprovechó para preguntar los requisitos y conocer el proceso correspondiente. Al ingresar, una mujer -encargada de dar la atención- le indicó los requisitos y el costo del trámite: 4 mil pesos al inicio, y los otros cuatro mil al momento de la entrega.
Aunque la presunta oficina no daba señales de ser un sitio oficial, sintió cierta “tranquilidad”, al ver que en el escritorio había una gran cantidad de licencias de manejo de al menos otros 100 usuarios, que, como él, también solicitaron el servicio.
Fue así que dio el primer pago por adelantado y, una vez concretada la solicitud, le pidieron regresar en un lapso de una semana. Cuando regresó ya le tenían los documentos solicitados, y terminó de pagar los 4 mil pesos restantes.
“Platicando con un amigo me dice “¿estás seguro de que estás dado de alta en el sistema y que esto es legal?” Yo le dije que sí, porque incluso me dieron todos los comprobantes originales y en los documentos trae los códigos QR que te dirigen a la página de Finanzas. Incluso ellos mismos me dijeron que yo checara el acceso al código y sí funcionó”, expuso.
No obstante, al momento de hacer la revisión minuciosa se dio cuenta de que todos los documentos eran falsos y que la supuesta página de Finanzas también es falsa.
Comprueba existencia de duplicado de placa
En cuanto se percató del hecho, solicitó asesoría legal para averiguar qué había sucedido, y en efecto comprobó que había sido víctima de una estafa en la que propició la duplicación de una placa que alguien más ya tenía.
Al entrar a la página de Adeudo Vehicular del gobierno del estado ingresó su número de placa y se impresionó al ver que tenía un adeudo de 4 mil pesos, empero, el modelo, marca, línea y tipo de vehículo no correspondía con las de su unidad. En efecto, el número de placa ya tenía otro usuario.
Este hecho lo llevó a reflexionar que las personas que se dedican a la prestación del “servicio” cuentan con todo un sistema de equipos, software, materiales y logos para diseñar, imprimir y maquilar esta papelería apócrifa para engañar a los clientes.
“A toda luz es un delito, por utilizar logos oficiales de la autoridad estatal”, compartió.
Tras este reporte, El Sol de Puebla acudió al lugar y pudo constatar que, en efecto, únicamente se brinda el servicio bajo cita previa, y la persona que brinda la información para el trámite de licencias y placas vehiculares pide un anticipo de 4 mil pesos, pese a no ser un lugar oficial para este tipo de procedimientos. Incluso con el fin de enganchar al cliente, aseguran que la entrega se hace en un periodo de 10 a 15 días, para que los usuarios acepten en ese momento el trámite de su licencia o placa.
No solo operan en redes, también en puntos fijos
Aunque el principal modo para operar y convencer a los usuarios es mediante redes sociales, también existen algunos locales en los que se ofrece la gestoría para este tipo de trámites.
Uno de ellos es el ubicado en Boulevard Margaritas, entre la calle 16 de Julio y 27 de Septiembre, el cual la mayoría del tiempo se encuentra cerrado con candado y únicamente abren el local cuando el interesado hace una cita previa.
El sitio no cuenta con ningún rótulo o anuncio con la intención de pasar desapercibido. Al interior no cuenta con ninguna licencia visible, y la supuesta oficina está improvisada con un escritorio y un par de sillas para recibir a los interesados.
Otro de los lugares de este mismo tipo se encuentra en Bosques de Santa Anita, sobre la carretera que conduce a la junta auxiliar La Resurrección, a la altura de la 108 Oriente. El local tiene lonas y anuncios donde incluso destacan una oferta de dos licencias por 800 pesos.
"La promoción es por dos placas de Guerrero, pero sin problema puedes circular en Puebla. La ventaja es que estas las tienes en una semana y las de Puebla te las damos en 30 días. En el caso de las de Tlaxcala te salen en 9 mil 500 y las de Puebla como en 12 mil pesos aproximadamente", aseguró el encargado.
Entre los servicios que también dicen brindar está la expedición de placas de diferentes estados, licencias, permisos provisionales, refacturas y reposición de tarjetas de circulación. Los precios oscilan desde los 800 a los 5 mil pesos, dependiendo lo que se solicite.
En el recorrido también se logró ubicar otro punto ubicado en la carretera federal Puebla- Atlixco, en el municipio de Tlaxcalancingo, exactamente a la altura de la calle 5 de Febrero. Igual que en los otros dos negocios, no se observó una licencia de funcionamiento y parte de los servicios que ofrecen son permisos de carga, cambio de propietario, gestión de placas, licencias de manejo y altas en Repuve. El costo de los servicios oscila entre los mil y 8 mil pesos, lo que depende del trámite.
"Podemos tramitarte el pedimento, la licencia , las placas, pero primero hay que ver cómo están los documentos del carro", señaló la representante del negocio.
Riesgo de fraude
A diferencia de las oficinas gubernamentales, estos puntos no cuentan con alguna garantía, por lo que las personas son más propensas a ser víctimas de fraude.
Es por ello que, aunado al artículo 253 Bis del Código Penal de Puebla, el mismo documento señala que en el caso de delito de fraude se sancionará de la siguiente manera:
I. Con multa de cinco a cincuenta días de salario y prisión de seis meses a tres años, si no se puede determinar el valor de lo defraudado o este valor no es superior a cien días de salario.
II. Con multa de cincuenta a doscientos cincuenta días de salario y prisión de tres a cinco años, si el valor de lo defraudado excediere de cien días de salario, pero no de quinientos.
III. Con multa de doscientos cincuenta a quinientos días de salario y prisión de cinco a siete años, cuando el valor de lo defraudado excediere de quinientos días de salario, pero no de mil, y
IV. Con multa de quinientos a mil días de salario y prisión de siete a diez años, cuando el valor de lo defraudado excediere de mil días de salario.
En el caso del Artículo 243 del Código Penal Federal destaca que “El delito de falsificación se castigará, tratándose de documentos públicos, con prisión de cuatro a ocho años y de doscientos a trescientos sesenta días multa. En el caso de documentos privados, con prisión de seis meses a cinco años y de ciento ochenta a trescientos sesenta días de multa”.
Pese a este panorama, al hacer una revisión de distintas bases de datos, no existe un registro que detalle las denuncias que hay respecto a este tipo de casos y únicamente se menciona el delito de fraude sin especificar el motivo.
Necesario fortalecer los controles de emisión y registro de placas
Bajo este escenario y de acuerdo a lo que dicta la ley resulta necesario fortalecer los controles en los procesos de emisión y registro de placas vehiculares, garantizar que los documentos y registros relacionados con la emisión de placas sean resguardados adecuadamente, y que existan rigurosos protocolos de verificación de identidad y propiedad antes de asignar una placa a un vehículo.
Asimismo, es fundamental concienciar a la sociedad, y principalmente a los propietarios de vehículos, sobre los riesgos y peligros asociados con la clonación de placas, por lo que el trámite de cualquier documento oficial debe hacerse en oficinas que cuenten con las autorizaciones y reglamentación correspondientes.
Finalmente, es necesario adoptar medidas efectivas para prevenir y combatir la venta ilegal de placas, fortaleciendo los sistemas de identificación, mejorando los controles y fomentando la colaboración entre las autoridades, pues solo así se podrá garantizar una mayor seguridad vial y proteger los derechos y bienestar de los ciudadanos.