“¡Qué se pare!” y “¡Queremos votar!” eran los gritos que retumbaban en la presidencia auxiliar de Santa María Xonacatepec minutos antes de suspender la elección debido a la confrontación verbal y física de la población así como simpatizantes de las 9 planillas.
Por más de dos horas los pobladores discutieron verbalmente; unos votar mientras que otros exigían cancelar los comicios y es que argumentaban que su nombre no aparecía en la lista nominal.
Inicialmente los pobladores estaban separados pero después llegaron al centro de votación donde empezaron a romper los listones amarillos de “Precaución” para impedir que los sufragios continuaran.
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En medio de gritos y después de llamar a la policía, los uniformados intervinieron aunque por pocos minutos ya que la población siguió descalificándose entre gritos e identificándose como grupo “rojo” y “morado”.
- “No tienen pantalones”
- “Chillones”, “No saben perder”, “Ustedes solo saben hacer trampa”, “Su candidato no los defiende por eso no están en la lista”
Fueron algunas frases que se decían las familias de Xonacatepec.
Mientras esto ocurría, los representantes de casilla abrazaban las urnas para protegerlas en medio de gritos de la gente de “hay que quemarlas” o “tacharlas”.
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En un momento de tensión, la policía y personal de la Secretaría de Gobernación decidieron llevarse el material electoral aunque la población intentó quitárselos.
De manera casi paralela, mujeres y hombres se agarraron a golpes e hicieron agresiones verbales pero fueron separados por la propia población sin que hubiera detenidos.
