El movimiento Anti-Releccionista, a través de su vocero, Manuel Carmona Sosa, aseguró que las elecciones del pasado 1 de julio en Puebla tuvieron un comportamiento atípico, irregular de principio a fin y plagado de violencia como nunca antes se había visto, lo cual mancha por completo los comicios y pone en duda el resultado electoral.
Acusó que las instituciones fueron parciales y también las gubernamentales, pues los elementos de seguridad no estuvieron presentes en los actos violentos registrados en la entidad, pero sí en las diversas protestas de ciudadanos que se realizaron el día martes para desconocer el triunfo de Martha Erika Alonso, como gobernadora de Puebla.
“Los órganos electorales bajo su jurisdicción están al servicio de los intereses del ex gobernador Rafael Moreno Valle, que no le importó sembrar el terror el pasado domingo primero de julio, al exponer a su suerte a niños, mujeres y ancianos, mismos que quedaron a merced de comandos armados que entraron a robarse las urnas, con tal de torcer la voluntad de los poblanos e imponernos a su esposa como la próxima Gobernadora”.
Destacó que los órganos electorales en Puebla quedaron evidenciados como trabajadores de Rafael Moreno Valle, ex gobernador del estado y esposo de la candidata de “Por Puebla al Frente”.
Dijo que existe una escalada de violencia en las últimas 96 horas en Puebla, pero lo único real es que la elección del pasado 1 de julio ya está manchada y no se ha respetado la voluntad de los votantes.
“El aparato de gobierno del cual se encuentra al frente José Antonio Gali Fayad, ha abandonado a su suerte a la ciudadanía para concentrar a todas las corporaciones de seguridad pública, para intimidar a los votantes y pretender imponer con el uso de la fuerza a la señora Martha Erika Alonso como triunfadora en la elección a la gubernatura”, expuso.
Añadió que esta operación se contó con el apoyo y la complicidad de los consejeros del Instituto Estatal Electoral (IEE).
“Los votantes no lo van a permitir, por los excesos en los que incurrió el morenovallismo de echar mano de los métodos más viles y gansteriles para robarse la elección y ahora no se trata de defender a Luis Miguel Barbosa, sino que la molestia social va más allá, es defender la democracia y defender el derecho de la sociedad a que se respete su voto”, finalizó.