Cada 11 de septiembre se recuerdan los atentados terroristas que se registraron en diferentes puntos de Estados Unidos en el 2001 y que dejó cerca de 3 mil muertos, así como una gran cantidad de desaparecidos y otro tipo de pérdidas que hasta la fecha siguen generando estragos.
El ataque a las Torres Gemelas en Nueva York es uno de los hechos más rememorados, pues fue aquí en donde se presentó la mayor cantidad de defunciones, entre empleados de estos edificios, civiles que se encontraban en zonas aledañas, así como varios integrantes del cuerpo de rescatistas.
Las consecuencias políticas, militares y económicas quedaron marcadas a nivel internacional. Del mismo modo, estos acontecimientos se volvieron parte de la cultura popular al contar con referencias dentro de películas, series y otros proyectos similares.
¿Cómo ocurrieron los atentados?
Todo comenzó durante las primeras horas del 11 de septiembre del 2001, cuando alrededor de las 8 de la mañana los terroristas secuestraron cuatro vuelos comerciales que circulaban dentro de Estados Unidos. Para cumplir con este objetivo ingresaron a las cabinas, atacaron a los pilotos y agredieron a los pasajeros.
De acuerdo con la BBC, el primer avión en caer fue el Vuelo 11 de American Airlines (AA11), que se estrelló contra la Torre Norte de las Torres Gemelas del World Trade Center (WTC). El impacto atravesó del piso 93 hasta el 99, lo que dejó cientos de muertos a su paso.
Los empleados que estaban en este inmueble intentaron buscar la salida, aunque algunas personas pudieron bajar, para la mayoría esto no fue posible, ya que los accesos estaban bloqueados, además, el combustible había ocasionado explosiones y otro tipo de daños.
En ese momento, el entonces presidente estadounidense, George Bush, fue notificado cuando estaba leyéndole a los niños de una escuela, él prefirió mantener la calma y seguir con la actividad.
El segundo vuelo que chocó fue el 175 de United Airlines (UA175); esta ocasión se impactó a las 9:03 h contra la Torre Sur del WTC de los pisos al 77 al 85, aunque el resultado era similar al del AA11, la infraestructura sufrió menos daños.
Pese a los esfuerzos de evacuación, ambos edificios colapsaron, lo que dejó muchas pérdidas humanas, así como materiales. Las autoridades reportaron que se contabilizaron un total de 2 mil 763 muertos.
¿Qué pasó con los otros aviones?
En cuanto al resto de los aviones, el vuelo 77 de American Airlines (AA77) se llevó hasta el Pentágono, la sede del Departamento de Defensa. Al estrellarse liberó una bola de fuego que alcanzó unos 60 metros de altura. El número de personas sin vida fue de 189.
Por último, estuvo el vuelo 93 de United Airlines (UA93), que fue secuestrado a los 46 minutos de haber despegado: “Señoras y señores: les habla el capitán. Por favor siéntense y permanezcan sentados. Tenemos una bomba a bordo. Así que siéntense”, indicó Ziad Jarrah, secuestrador que tomó el control.
Esta vez, quienes estaban en el avión se rebelaron contra los delincuentes, por lo que decidieron unir fuerzas para ingresar a la cabina del polito y sacarlos de ahí. Esto hizo que los terroristas no pudieran llegar a su destino que era Washington D. C.
La BBC reportó que en la caja negra se pueden escuchar gritos y forcejeos de los pasajeros que querían abrir la puerta, mientras los secuestradores reciben la orden de bajar la unidad. Antes de estrellarse se escucha a los criminales exclamar: “¡Alá es lo más grande!”.
Así, el transporte aéreo se impactó contra un campo a las afueras de Pittsburgh, en Pensilvania. Fallecieron 44 personas, no quedó ningún sobreviviente, sin embargo, las autoridades recuerdan a estos tripulantes como unos héroes.
Este atentando se le fue atribuido a Al-Qaeda, dirigida en este momento por Osama Bin Laden y que es identificada como una organización terrorista que se comporta con una doctrina extremista de la religión islámica. Existe un gran archivo con fotografías y videos de este ataque, en donde se puede ver a mucha gente escapando.