Cientos de cubanos se hicieron presentes en el Vaticano para la misa del Angelus del Papa Francisco, pero no pudieron ingresar a la Plaza de San Pietro al ser detenidos por la seguridad de la sede.
Por medio de las redes sociales se mostraron diversas imágenes de las protestas como de los problemas en los que se vieron los ciudadanos que comenzaron a desplegar las banderas de Cuba. Su intención es que el pontífice se manifieste sobre la situación que se vive en la isla dentro de las protestas de la llamada “marcha del 11J” como de los presos políticos que estas originaron.
SEGURIDAD INTERVIENE EN EL MOVIMIENTO
Los cubanos se dieron cita en el Vaticano luciendo ropa blanca con diversas banderas como símbolos de Cuba para ser parte de la misa, pero los guardias intervinieron rápidamente para detenerlos.
En las imágenes difundidas, se ve a los cubanos informando que los guardias aseguraban que su presencia se veía como un acto hostil hacia la sede, por lo que no podían ingresar. Después, comenzaron a colocar vallas metálicas para controlar y separar al grupo del resto de fieles presentes para la misa.
Al final, solo 50 personas pudieron ingresar y la seguridad pidió que no realizaran consignas ni presentaran carteles o banderas para ser parte del evento, relató uno de los participantes al sitio CiberCuba.
Dentro de los videos publicados, se volvió viral el momento en que los elementos de seguridad deciden quitarle la bandera de Cuba a un posible manifestante que se encontraba arrodillado en la Plaza de San Pietro.
Los agentes se acercan al joven que se encuentra de rodillas con la bandera desplegada con sus brazos en alto. Después de levantarlo, la seguridad lo rodea y uno más parece arrebatarle la bandera para quedársela. Las personas comienzan a acercarse y a grabar lo ocurrido, lo que hace que la situación se controle.
Esta protesta fue convocada por uno de los líderes del movimiento libertario de Cuba, el influencer Alexander Otaola, quien también formó parte del evento y calificó como discriminatorio el que se les negara la entrada. Al quedarse afuera, decidieron comenzar a rezar como a recitar el poema “Mi Bandera” del poeta Bonificacio Byrne.
Otra parte del grupo se hizo presente en la Via della Conciliazione, en donde al ser negados de entrar a la plaza principal, comenzaron a tenderse en el piso y envolverse con la bandera cubana.
Diversas agencias informaron que los canticos de “¡Libertad!” se hicieron presentes en todo momento y que se concentraron al menos 500 cubanos de diversas partes del mundo.
“Nos arrodillamos frente al Vaticano porque no nos dejan pasar, nuestra fe no merece ser escuchada según la iglesia católica, así nos segregan y dividen a quiénes pacíficamente queremos libertad y derechos humanos para nuestro pueblo”, escribió Lázaro Mireles, activista cubano exiliado en España en sus redes sociales. “Esta es una prueba más de que la Iglesia católica está apoyando a la dictadura”.
LA SITUACIÓN EN CUBA Y CON EL VATICANO
Todo el movimiento se genera desde las protestas del 11J (11 de junio) en la isla, siendo el comienzo de un momento histórico en el verano por la cantidad de personas que salieron a las calles.
Desde el comienzo de las manifestaciones, se estima que más de 1,130 personas fueron detenidas por reclamar sus derechos como mostrar su descontento con el gobierno. Al menos 500 personas se mantienen en las rejas y algunos enfrentan cargos que van de los 75 a los 27 años de prisión.
Por ello, se alista una nueva manifestación para el próximo 15 de noviembre bajo el movimiento 15N, en donde se busca visibilizar la represión de parte del gobierno como la libertad de los presos políticos.
Después de darse las protestas originales del movimiento en julio, el Papa Francisco dio un mensaje al pueblo cubano en la misa del Angelus del 18 de julio. En aquel momento, pidió que se reforzara el diálogo y la solidaridad, además de pedir por la paz.
Desde entonces no se ha vuelto a pronunciar acerca del tema, lo que levantó las sospechas de los participantes del movimiento en contra de la dictadura en la isla. También, hicieron notar que el ingreso de banderas o de símbolos nacionales no es algo prohibido en la llamada Santa Sede, por lo que no comprenden lo ocurrido con la bandera cubana.
PAPA FRANCISCO HACE UN LLAMADO POR LOS MIGRANTES
Por otra parte, dentro del mensaje de este domingo del Papa Francisco, hizo un llamado para detener el regreso de migrantes que huyen de países donde sufren de violencia inhumana.
Se refirió en específico al caso de los migrantes que han sido rescatados en el mar Mediterráneo, señalando que se deben encontrar formas de gestionar estos flujos migratorios como alternativas para la protección de asilo.
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De acuerdo a diversas autoridades, al menos 3,400 migrantes han llegado a pueblos como Roccella Ionica en Italia. La mayoría procedentes de Afganistán, en lo que ha comenzado a convertirse en una crisis, debido a que solo 480 migrantes llegaron a la zona en todo el 2020. Los migrantes salen de países como Libia o Turquía en busca de llegar a Sicilia o a alguna península italiana.
“Muchos de estos hombres, mujeres y niños están sujetos a la violencia humana. Una vez más pido a la comunidad internacional que cumpla las promesas de buscar soluciones comunes, concretas y duraderas para gestionar los flujos migratorios en Libia y en todo el Mediterráneo”, expresó el pontífice.
