Francia aprobó una nueva ley para frenar los contagios de la Covid-19 al concretar una mayor cantidad de restricciones para las personas no vacunadas. Emmanuel Macron, presidente del país, impulsó estas medidas, pero no tuvieron una rápida aprobación ante la resistencia de los legisladores y las protestas en las calles.
Se debe a que las personas no vacunas ahora no podrán ingresar a restaurantes, estadios deportivos y otros sitios públicos. Anteriormente las personas que no contaban con alguna dosis podían ingresar a estos lugares al solo mostrar una prueba negativa reciente del virus.
De acuerdo con datos del Ministerio de Salud francés, cerca del 78 por ciento de la población ya cuenta con su esquema de vacunación completo. En contraparte, más del 76 por ciento de las camas en cuidados intensivos de los hospitales se encuentran ocupadas por pacientes sin vacunar. En el número de casos, tuvieron un aumento de 2,800 positivos por cada 100,000 personas en la última semana a causa de la variante Ómicron y al menos 200 personas fallecen al día a causa del virus.
LA NUEVA LEY DE FRANCIA
En las nuevas medidas se establece el obtener un “pase de vacuna” con el que hagan válido que cuenten con el esquema de vacunación completo. Muchos analistas señalaban que esta era una medida que podría terminar por marcar la diferencia, debido a que en la población adulta el 91 por ciento de los franceses ya están vacunados.
El presidente Macron comentó hace unas semanas que haría todo lo posible para hacer enfadar a las personas que no están vacunadas para que lo hicieran y finalmente llegar a ese 100 por ciento. El pase de Covid ya era necesario para ingresar a cines, museos, restaurantes, pero no era obligatorio al poder mostrar una prueba negativa.
Junto a los sitios comerciales, ahora también se unieron a la medida los sitios turísticos, muchas de las líneas de trenes y para todos los vuelos que se realicen al interior de Francia.
El pase de vacunación es obligatorio para todas las personas mayores de 16 años y solo se harán excepciones en aquellas personas que se recuperaron del virus recientemente del coronavirus. De igual forma, se establecieron nuevas multas mucho más altas para aquellos que muestren pases falsos.
DURA BATALLA PARA APROBAR LA MEDIDA
Desde que se dio a conocer la nueva medida, varias manifestaciones han ocurrido en París y las principales ciudades de Francia. La principal queja se daba contra la aprobación del pase de vacunación, al parecer una medida excesiva y para algunos discriminatoria al no poder ejercer su libertad de no optar por la vacuna.
Las protestas fueron a la baja en cantidad de personas y lugares con el paso de los días, en especial tras los comentarios de Emmanuel Macron sobre su disposición de hacer un esfuerzo máximo para que todos los ciudadanos se vacunen.
Estas muestras de desaprobación llegaron hasta el Parlamento de Francia, en donde los legisladores sostuvieron largas discusiones para decidirse a aprobar la nueva ley. Los partidos de oposición consideraron que las disposiciones eran demasiado restrictivas, por lo que buscaron negociarlas sin éxito. Al final, la votación quedó en 215 votos a favor por 58 en contra.
Dentro de Europa, Francia junto a Portugal y Suiza han informado de un aumento acelerado de los casos desde el comienzo del año. En especial por la llegada de la variante Ómicron, la cual ya es la dominante dentro del país. Las autoridades francesas apuntan a que el récord en el número de casos siga en aumento en los próximos días, pero se mantienen en calma debido a que las personas que necesitan hospitalización en cuidados intensivos es mucho menor a lo visto en la primera ola de la Covid-19 en 2020.