A punta de pistola, liberan a 16 internos de un centro contra adicciones en Puebla

Sujetos armados irrumpen en  inmueble de la colonia Ampliación Guadalupe Hidalgo

Joel Arcega | El Sol de Puebla

  · lunes 6 de julio de 2020

Foto: Héctor González | El Sol de Puebla

A punta de pistola y realizando detonaciones de arma de fuego, tres sujetos irrumpieron en un anexo al sur de la ciudad y liberaron a 16 internos, ayer por la mañana. Las autoridades policiacas descartaron un “levantón” e implementaron un dispositivo de búsqueda permanente de los responsables.

De acuerdo con fuentes policíacas y mediante la entrevista hecha con los encargados del lugar, así como con los pocos internos que se quedaron, se sabe que alrededor de las 9 de la mañana llegaron sujetos armados al lugar denominado “Aprehendiendo a Vivir” ubicado en la 3 Sur y 131 Poniente de la colonia Ampliación Guadalupe Hidalgo.

Tras ingresar realizaron dos disparos al aire, amagaron a los encargados y gritaron que quien quisiera se podía marchar de manera voluntaria. Fue así que 16 personas que se encontraban en rehabilitación decidieron abandonar el sitio.

Cabe decir que según testigos, lograron identificar a uno de los hombres armados como una persona que estuvo hace tiempo anexado en el lugar.

Poco después llegaron elementos policíacos municipales, sin embargo, ya no fue posible ubicar a los responsables.

Además de que la Secretaría de Seguridad Ciudadana informó que junto con su área de inteligencia, implementaron un dispositivo permanente para la búsqueda de los responsables, descartaron totalmente que se tratara de un hecho de privación ilegal de personas.

UN CASO SIMILAR OCURRIÓ EL AÑO PASADO

Cabe recordar que este medio público un caso ocurrido la noche del martes 12 de febrero del año pasado, en el anexo “Guerreros En Cristo” en la junta auxiliar Ignacio Romero Vargas.

En aquella ocasión hombres armados se llevaron del lugar privado de su libertad por unas horas al “padrino” (encargado del sitio) y a una adolescente que estaba anexada.

Fuentes policiales presumen que el móvil puede ser el disgusto de algún anexado o de sus familiares, pues muchas veces no están de acuerdo con los métodos de rehabilitación que utilizan las personas que dirigen esos sitios; las autoridades ministeriales ya iniciaron las investigaciones correspondientes.