Ignorada por las autoridades, con problemas de salud y económicos, es como Aris Garcé se encuentra a un año de que denunciara el cateo erróneo que agentes ministeriales llevaron a cabo en el domicilio que rentaba y donde elementos de la Fiscalía no solo causaron daños materiales, sino que también robaron dinero y objetos de valor, por lo que la joven pidió el apoyo del gobernador del estado para que su caso no quede impune.
Luego de que el 18 de enero de 2022, la artista y animadora de eventos sociales, denunciara lo ocurrido en la colonia México 83, a través de un video que compartió en facebook, el hecho de inmediato causó indignación entre los usuarios de la plataforma que compartieron la denuncia pública hasta que esta llegó a los medios de comunicación.
Después de que el caso atrajera los reflectores, la Fiscalía de Puebla comenzó una investigación en contra de los agentes que participaron en dicha intervención y en la que supuestamente buscaban atrapar a un narcomenudista, quien después del error de las autoridades, se supo logró darse a la fuga ya que el domicilio que habitaba se encontraba muy cerca del punto.
En entrevista para El Sol de Puebla, la víctima comentó que después de lo ocurrido en la institución procuradora de justicia le solicitaron no dar mayor información sobre el caso para no entorpecer las investigaciones; debido a que la joven observó que sí le estaban haciendo caso, decidió acceder a la petición.
Sin embargo, con el paso de los meses le fueron cambiando de Ministerio Público hasta que detuvieron el caso y dejaron de avanzar en él, incluso señaló, le han puesto trabas ya que le solicitaron el contrato de arrendamiento para corroborar que solo rentaba ahí, pero asegura que el día del cateo (23 de diciembre de 2021) se perdió el contrato junto con varios papeles, luego de la forma tan abrupta en la revolotearon la casa.
Ingresan orden de cateo distinta a la carpeta
Aunque la joven también solicitó una copia con la casera, esta le dijo que ya no lo tenía.
Sumado a lo anterior, la declarante acusa que la Fiscalía no quiere admitir el error que tuvieron sus agentes al confundirse de domicilio pues ahora dentro de la carpeta de investigación ingresaron una orden de cateo con información distinta a la mostrada en la orden que llevaban el día de las revisiones, pues mientras aquel día se indicaba un domicilio diverso al suyo, ahora en la carpeta ya mencionan y describen la vivienda que ella rentaba.
Ante este tipo de inconsistencias y a las afectaciones emocionales como de salud que le derivaron tras los hechos que también le han arrastrado problemas económicos, la entrevistada pide la intervención y ayuda del gobernador Sergio Salomón Céspedes para que el caso se resuelva y los acusados se hagan responsables de los daños y robo de más de 50 mil pesos que la joven denunció en su momento.
Agentes irrumpen de forma violenta
Cabe recordar que, a través de redes sociales la joven exhibió imágenes y videos de cómo los elementos dejaron su casa, además de que relató que le robaron cremas, joyas y 50 mil pesos en efectivo que tenía de los cobros de eventos que previamente había realizado, ya que se dedica a la animación de eventos.
No obstante, también mencionó que los agentes ministeriales derrumbaron el zaguán de la casa donde rentaba, por lo que creyó que iban a matarla o a secuestrarla.
“Fue un mes con mucho trabajo, en el que dormíamos poco para cubrir todos los eventos que hubo en el mes y poder recuperarnos de la pandemia ya que no habíamos trabajado, contaba con dinero que había cobrado; estaba acabando de adornar, cuando escuché, aproximadamente a la 1 de la mañana un golpe muy maye fuerte en el zaguán, me asomé por la puerta y vi cerca de 20 personas que habían derribado el zaguán con un mazo, me espanté, pensé que me iban a secuestrar o a matar”, narró en su momento la agraviada.
Aunque la joven trató de explicar la situación, los agentes hicieron caso omiso; luego de las revisiones correspondientes, descubrió que en su buró ya no estaba un sobre amarillo con 50 mil pesos, además de unas cremas de regalo de una marca para el cuidado de la piel y aretes de oro.
Tras los hechos, Aris Garcé reclamó a los agentes por el robo de su dinero y otras pertenencias, no obstante, uno de los agentes señaló que era imposible encontrar su dinero debido a que habían entrado varios compañeros e incluso se negó a revisarlos para ver quién se apoderó de los objetos de valor y la citada cantidad.
Luego de que varios vecinos de la joven salieran de sus domicilios para apoyarla y confrontaran a los agentes, estos decidieron retirarse.
Más tarde se supo que se habían equivocado de casa y a quién buscaban era al dueño de un grupo sonidero.
