Padre e hijo, acribillados el viernes pasado en una gasolinera del municipio de Tepeojuma, llevaban consigo dos armas de fuego así como cartuchos útiles, reforzando así la hipótesis de las autoridades policiacas acerca de que los occisos podrían haber estado involucrados en actividades delictivas y que el ataque fue un ajuste de cuentas entre grupos criminales.
Así lo dieron a conocer fuentes policiacas, quienes a su vez confirmaron que las víctimas son padre e hijo, identificados como Plácido de 45 y Jorge Luis de 26, originarios de la misma comunidad donde se dio el ataque.
De igual manera se ha revelado que los presuntos homicidas son dos sujetos que iban encapuchados y a bordo de un automóvil Sedan, gris.
Las armas que usaron para el doble asesinato, indicaron las fuentes consultadas, fueron de grueso calibre AR-15.
Durante las diligencias del levantamiento de los cuerpos, las autoridades descubrieron que padre e hijo tenían en su poder dos armas de fuego, una pistola calibre 9 milímetros y otra calibre 38 Super, además de cartuchos útiles.
A su vez, información compartida a este medio señala que la doble ejecución dejó a una víctima colateral, tratándose de una despachadora de la gasolinera donde todo sucedió.
La lesionada fue identificada como Alicia de 38 años, por lo que fue llevada de emergencia al hospital del IMSS en Metepec, Atlixco, donde permanece bajo atención médica.
Como en su momento se dio conocer, los ahora fallecidos estaban cargando combustible en un vehículo Chevrolet, Cavalier rojo de modelo atrasado cuando sus atacantes llegaron, estacionaron el sedán a la entrada de la gasolinera y descendieron con las armas largas en mano.
Sin mediar palabra, los sujetos dispararon varias veces en contra de Plácido y José Luis, causándole múltiples heridas en el tórax, rostro, y cabeza por lo que le muerte de ambos fue instantánea debido a la gravedad de las heridas.
Las investigaciones están a cargo de la Coordinación General Especializada en Investigación de Homicidios Dolosos de la Fiscalía General del Estado, la cual ha iniciado la revisión de cámaras de videovigilancia en las inmediaciones de la gasolinera, con el objetivo de obtener características que permitan la identificación de los agresores.