Un hombre fue asesinado sobre el puente que comunica al municipio de Amozoc de Mota con la exhacienda de Calpulac y su cuerpo fue arrojado a la autopista a Perote, donde múltiples vehículos lo remataron y dejaron semidesecho, ayer por la madrugada.
De acuerdo a los datos recabados se sabe que momentos después de las tres de la madrugada, se reportó a los servicios de emergencia que había una persona arrollada sobre la citada autopista, a la altura del kilómetro 3 y en sentido a Puebla.
Más tarde llegaron elementos de la Policía Federal y confirmaron que había un hombre con las piernas destrozadas y múltiples fracturas en el resto del cuerpo, por lo que procedieron a abanderar la zona y cuando se presentaron también paramédicos de Capufe, indicaron que carecía de signos vitales.
Al hacer una inspección en el lugar, se detectaron algunos indicios que daban cuenta de que se trató de un asesinato y no un hecho de tránsito –el atropellamiento-, como quizás trataron de aparentar él o los homicidas.
Al dar parte a las autoridades ministeriales con jurisdicción en Tepeaca, y hacer presencia en el sitio, comenzaron las diligencias del levantamiento de cadáver durante las cuales con detalle se anotó que el cuerpo, además de haber sido casi desecho por incontables vehículos que le pasaron encima; presentaba huellas de tortura y sobre todo una herida en cráneo, posiblemente de arma de fuego.
El cuerpo se encontraba en la parte baja del puente vehicular que atraviesa por la autopista y va del centro de Amozoc a la ex-hacienda de Calpulac. En la base del puente curiosamente hay un anuncio con fondo rojo y letras blancas con el slogan “La vida es corta, ¡Cuidala!...”
Precisamente en la parte alta del puente, sobre el barandal en la base de cemento de la misma protección, se encontraron manchas de sangre, con lo cual se dedujo que la víctima fue asesinada arriba y después los responsables lo arrojaron a la autopista donde debido a la obscuridad de la noche, algunos usuarios no se percataron del cuerpo y le pasaron encima.
Solamente se pudo describir que era un hombre de entre 25 a 35 años de edad, que vestía pantalón tipo militar, playa de color azul marino con rayas de color rojo, y una chamarra de color beige. Además de que cerca de su cabeza y brazo izquierdo, quedó una cadena y un dije de la Santa Muerte con incrustación de piedras, al parecer de oro y ensangrentados.
El personal de la Fiscalía General del Estado abrió la carpeta de investigación correspondiente y ordenó el traslado del cuerpo al anfiteatro para hacerle la autopsia de rigor y esperar que más adelante alguien se presente a identificarlo y reclamarlo.