Esta madrugada fue atacado a balazos el gimnasio City Fitness, por sujetos desconocidos que lograron huir. Hace exactamente 3 semanas, dos hombres con acento extranjero mataron a balazos al propietario del lugar, cuando se encontraba en un local de comida a un costado del gym, en el municipio de Cuautlancingo. Todo estaría relacionado a amenazas por cobro de piso por parte de una banda de colombianos.
De acuerdo a los primeros reportes policiales, serían alrededor de las 2 de la madrugada, cuando desconocidos llegaron hasta el gimnasio ubicado sobre la avenida Revolución y Antiguo Camino a San Lorenzo en la junta auxiliar de Sanctorum y frente al panteón El Edén; para hacer diversos disparos contra la fachada.
Aunque dejaron pasar algunos minutos, volvieron a agredir el lugar y finalmente se marcharon. Cuando los asustados vecinos lo reportaron y al llegar policías municipales de Cuautlancingo, ya los responsables se habían esfumado.
Por ello la zona fue ampliamente acordonada y esta mañana se presentaron autoridades ministeriales de la Fiscalía General del Estado para encargarse del levantamiento de indicios para las investigaciones pertinentes.
Semanas atrás mataron al dueño
Cabe recordar que Genaro, de 39 años de edad, dueño de dicho gimnasio, el pasado 5 de julio se encontraba con otra persona en un local junto al City Fitness, cuando de pronto llegaron dos sujetos en motocicleta y después de cruzar algunas palabras, uno de ellos le disparó en repetidas ocasiones arrancándole la vida.
Los responsables huyeron y al momento no hay avances en las investigaciones que apuntan extra oficialmente a un cobro de piso por parte de una banda delictiva conformada por colombianos.
También pululan en el sitio préstamos gota a gota
Durante un recorrido de este medio por la zona donde se localiza el gimnasio City Fitness, vecinos que pidieron la gracia del anonimato, aseguraron que escucharon en la madrugada entre 8 y 10 detonaciones de arma de fuego, pero por miedo no salieron de sus casas y solamente llamaron al número de emergencia 9-1-1, enterándose más tarde lo que había ocurrido.
Aunque dueños de negocios cercanos y otros vecinos fueron entrevistados sobre la seguridad en el lugar, la mayoría prefirió no hablar del tema por miedo a represalias.
Otros, también bajo el anonimato, afirmaron que “ha aumentado la inseguridad en la zona desde hace 2 ó 3 años que comenzaron a llegar personas extranjeras, sobre todo de origen colombiano y peruano”.
Aseguran que estas personas se dedican a promover el préstamo de dinero a crédito conocido como “gota a gota”, ofreciendo bajos intereses; sin embargo, es un engaño, pues cobran excesivamente y cuando alguien ya no puede pagarles, los obligan a pagarles golpeándolos, amenazándolos e incluso agrediéndolos con armas.
Otro entrevistado señaló que hay grupos delictivos que están amenazando a negocios con el llamado cobro de piso, es decir, un pago mensual para permitirles trabajar y no hacerles daño, como ocurrió con el citado gimnasio y su dueño que fue asesinado en un pequeño local de comida, cuyo propietario optó por cerrar su negocio.
Finalmente, los declarantes piden que intervengan las autoridades policíacas y ministeriales para indagar a fondo a estas bandas y a la gente extranjera que se ha establecido en la zona.