Diversos reglamentos, códigos e instrumentos jurídicos dejan casi en totalidad indefensión a policías que como en días recientes, tras acudir a un llamado de auxilio, fueron brutalmente golpeados por sujetos en estado de ebriedad, pues a los oficiales sólo se les permite defenderse con el uso de la fuerza cuando hay un peligro inminente que no contempla por ejemplo, los golpes o agresiones con piedras.
Es así como entre 2022 y lo que va de 2023, en diferentes puntos del estado de Puebla se han registrado al menos seis agresiones contra policías municipales y estatales.
Un oficial entrevistado bajo el anonimato, consideró que con el paso del tiempo la sociedad no sólo ha ido perdiendo confianza en las autoridades por las malas acciones cometidas por unos cuántos, sino también el respeto, lo cual ha derivado en que día con día tengan los uniformados que lidiar con civiles que se oponen a seguir las reglas.
El declarante refirió que si bien hay una clasificación para el uso de la fuerza por parte de los policías para con los civiles, dependiendo la situación en la que se encuentren, a fin de evitar abusos, hay casos en los que los uniformados soportan de todo ya que están imposibilitados para frenar de manera contundente las agresiones.
Clasificación policíal, ¿en qué casos y cómo responden los policías?
Al respecto, el policía explicó que hay seis clasificaciones o tipo de respuesta policial. El primero que es la presencia de los uniformados con su equipo y patrulla de forma responsable; la verbalización, que prácticamente es entablar un diálogo con los involucrados; control de contacto, que tiene que ver con movimientos de contención para inhibir resistencia pasiva; reducción física de movimientos, que contempla la inmovilización y control ante la resistencia violenta, empleando candados de mano o cinchos de seguridad (esposas).
Además, está la fuerza no letal, que es la utilización de objetos como medio de control que no causen daño severo o permanente; y fuerza letal, como última instancia, ya que se trata de emplear armas de fuego que pueden acabar en daño físico severo o la muerte.
Es así como, indicó, hay “candados” para defenderse, aunque por otro lado también aceptó que en muchas ocasiones, los mismos policías pueden evitar agresiones como las que se han suscitado en los últimos días, ya que antes de acudir a un llamado de auxilio, deben medir el riesgo de la situación, si es una “zona roja”, y si pueden o no necesitar apoyo para así solicitarlo en el camino, solo como medida de prevención.
Sin embargo, muchas veces no se hace y ya cuando se está en una situación de peligro es cuando se solicitan refuerzos. Finalmente, el entrevistado comentó que hace falta ampliar y especificar o detallar ciertas situaciones en las que también los policías corren alto peligro.
En este sentido es de señalar que tan solo entre 2022 y lo que va de 2023, en diferentes puntos del estado de Puebla se han registrado al menos seis agresiones contra policías municipales y estatales
Casos de policías agredidos en Puebla
Romero Vargas
Apenas el pasado 27 de marzo, un grupo de cuatro hombres en estado de ebriedad, golpearon a dos agentes de la policía municipal de Puebla en la junta auxiliar Ignacio Romero Vargas, sitio al que acudieron tras un llamado de emergencia por pandilleros que se alcoholizaban y escandalizaban en la vía pública; los sujetos golpearon a los oficiales, pero principalmente a uno de ellos y aunque más tarde llegaron refuerzos, no fue posible ubicarlos.
Tlacotepec de Benito Juárez
El mismo 27 de marzo, se reportó que policías municipales de Tlacotepec de Benito Juárez fueron agredidos por un grupo de pobladores, luego de que auxiliaron a un elemento de tránsito que presuntamente había sido amagado con un arma de fuego por el conductor de una camioneta, luego de que este lo detuviera por una falta de tránsito.
Agentes de seguridad pública municipal siguieron la camioneta pero a la altura del Jaguey de San Félix, el agresor les disparó en varias ocasiones, para que luego un grupo de personas los rodearán y amenazaron con golpearlos, sin embargo, esto no sucedió y finalmente los uniformados se retiraron del lugar.
El Arenal de San Salvador Chachapa
Días antes, el 21 de marzo, policías municipales de Puebla fueron alertados sobre la presencia de decenas de sujetos en motocicleta, camionetas y automóviles que escandalizaban en la vía pública donde también hacían disparos al aire en la colonia El Arenal de San Salvador Chachapa, Amozoc; por ello al sitio acudieron policías estatales que fueron golpeados, agredidos a pedradas e incluso desarmados; dos resultaron heridos y tres presuntos responsables fueron capturados y vinculados a proceso.
Bosques de Santa Anita
Previamente, el 13 de marzo oficiales del municipio fueron golpeados tras acudir a un auxilio por sujetos que hacían disparos al aire en inmediaciones de la colonia Bosques de Santa Anita. Tras la llegada de refuerzos policiales se logró la captura de tres de los presuntos responsables.
Los uniformados de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) recibieron el reporte de posibles detonaciones de arma de fuego y de personas arrojando piedras, por lo que se trasladaron hasta la calle 108 A Oriente entre la 46 y 48 Norte de esta colonia perteneciente a la junta auxiliar de La Resurrección.
Al llegar los primeros policías y confirmar que había varios rijosos en el punto protagonizando una aparente riña, fueron recibidos a golpes resultando lesionados dos policías.
San José Chapulco
El 15 de abril de 2022 por la madrugada, oficiales a bordo de una patrulla de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) acudieron a San José Chapulco, por una riña en la que se reportaban disparos de arma de fuego; al llegar los elementos fueron recibidos con agresiones, resultando un policía municipal herido en la oreja derecha con amputación parcial, por la cortadura de machete.
Guardia Nacional y policías pelean
Finalmente, el 11 de abril de 2012, en redes sociales se viralizó el momento en que un sujeto con uniforme de la Guardia Nacional golpeó a policías de tránsito de Puebla.
El hombre y la mujer de la corporación local intentaron calmar al hombre que ya no pertenecía a la citada corporación; el sujeto nunca se sometió e intentó volver a su vehículo para darse a la fuga. El hecho fue reprobado por la sociedad, pues además se supo que el sujeto seguían ostentándose como parte dela GN para sacar algunos beneficios.