La última geolocalización de los celulares de David Báez Aburto, de 29 años de edad, y su esposa Jocelín Carreto Xaltenco, de 28 años, confirman que desaparecieron en el mercado de La Cuchilla el pasado 1 de junio tras salir de su domicilio en la unidad habitacional San Bartolo; aunque por el momento la Fiscalía de Puebla no cuenta con una línea de investigación, ya indaga las últimas llamadas y otra información de los números telefónicos de las víctimas para saber dónde podrían encontrarse.
Este martes por la mañana, ante la falta de información respecto a los avances en el caso, los familiares de la pareja desaparecida nuevamente decidieron manifestarse pero ahora afuera de Casa Aguayo, donde solicitaron una audiencia con el gobernador del estado Luis Miguel Barbosa Huerta.
Ahí según los familiares de los desaparecidos, les dijeron que acudieran a la Fiscalía de Puebla, donde el titular de la institución los iba a atender y darles respuestas; sin embargo, ahí tampoco les resolvieron nada y los enviaron a la Fiscalía Especializada en la Investigación de los Delitos de Desaparición Forzada de Personas y Desaparición Cometida por Particulares en la calle 16 de Septiembre y avenida 29 Oriente.
Lo anterior generó molestia entre los manifestantes, quienes decidieron cerrar por algunos minutos el bulevar 5 de Mayo, frente a la Fiscalía de Puebla, no obstante un grupo de policías estatales con equipo antimotín los desplegaron del lugar por lo que la familia de la pareja no localizada tuvo que seguir con su manifestación desde la rotonda de la zona.
Tiempo después llegó el señor Álvaro padre de David, quien señaló que la respuesta de las autoridades es que aún no cuentan con una línea de investigación, pero ya la están indagando por medio de la intervención de los números telefónicos de las víctimas cuya última geolocalización comprueba que desaparecieron en el mercado de La Cuchilla.
De esta forma seguirán esperando a tener mayores noticias sobre la localización de David y Jocelín, cuya hija de cuatro años los sigue esperando.
Por último, la familia de los jóvenes pidió a sus vecinos y demás asistentes terminar con la manifestación para evitar mayores confrontaciones con la policía o que alguien resultara herido pues también había niños presentes.