Las estafas cometidas por parte de vendedores de celulares en elmercado Jorge Murad Macluf, también conocido como “La Fayuca”,siguen a la orden del día, pues el caso de una víctima másllegó a la Redacción de El Sol de Puebla. Estos hechos continúanregistrándose a pesar de que en mayo de 2017, la Comisión deSeguridad y Vigilancia del citado lugar, de manera públicaasegurara que tomaría cartas en el asunto.
Por su parte, el encargado del área de comunicación social de“La Fayuca”, vía telefónica admitió que en la zona persisteneste tipo de hechos, sin embargo, señaló que cuando han tratadode controlar la actividad de los locatarios, hay quienes se oponen,por lo que incluso han llegado a los golpes.
LE PEDÍAN 4 MIL 600 PESOS DEMÁS
Sobre los hechos, el agraviado contó que la semana pasada, altransitar con unos familiares por el exterior de “La Fayuca”,vio unas réplicas de iPhone X cuyo costo era de mil 200 pesos; almomento de adquirir el aparato de telefonía, la mujer encargada deatender a los clientes, lo llevó hacia uno de los locales delinterior de la plaza comercial, donde le señaló a un hombre paraluego manifestarle que a él le tenía que pagar.
Ahí, el sujeto le puso un chip a la réplica de iPhone X paradespués cobrarle en total 5mil 800 pesos, cantidad que eldenunciante se negó a pagar, por lo que varios sujetos mássalieron a querer amedrentarlo, sin embargo, no contaban con queera acompañado por familiares de mayor corpulencia.
“Le pagué y me dijo: ‘te checo el certificado del teléfonoy PS’, le contesté que sí y todavía me preguntó que siquería el chip en Telcel, Movistar o libre y le dije que libre; semetió a un cuartito y después de diez minutos salió para que yochecara si agarraba el chip, cuando le dije que sí, me queríacobrar 5 mil 800, por lo que me empecé a reír. Le pregunté quepor qué esa cantidad y me dijo que por ponerle la línea alcelular, obvio le contesté que estaba loco pero que me responde:‘me vas a pagar porque me vas a pagar’, al ver eso se acercómi papá y un tío”, contó la víctima.
Sin embargo en ese momento llegaron otros sujetos: “empezarona llegar tipos de diferentes locales, me rodearon y me advirtieronque si no quería problemas que mejor le llegara, pero como soynecio que me pongo al brinco; mi tío y mi papá igual, y como sonaltos pues la pensaron esos tipos, en fin, después de variosminutos acabaron por regresarme mis mil 200 pesos. Creo que uno deellos estaba grabando y cuando me fui me dijo: ‘cuídate eh’,así operan”, mencionó el afectado.
EL AÑO PASADO TURISTAS FUERON BLANCODE LA ESTAFA
Como este medio oportunamente lo informó, el 3 de mayo de 2017,tres visitantes oriundos del Estado de México que llegaron a laferia de Puebla, decidieron acudir a “La Fayuca” para ver si seanimaban a comprar algo; luego de que varios sujetos les ofrecierancelulares a buen precio, hasta llegar a los mil pesos por equipo,los turistas aceptaron comprar tres celulares.
Tras pagar tres los tres mil pesos por los equipos, losvendedores no les entregaron nada a los clientes y les dijeron queera necesario que fueran activados, por lo cual cada uno todavíales debían 6 mil 500 pesos.
Aunque las víctimas indicaron que solo querían el equipo sinactivar, los acusados se negaron a entregarlos por lo que losturistas solicitaron la devolución de su dinero; en ese instantellegaron aproximadamente 30 sujetos que rodearon a los turistas, aquienes según lo denunciado en ese instante, incluso amagaron con“levantarlos”, si no se iban. Por lo anterior, los agraviadosse retiraron de la zona a bordo de una camioneta con placas delEstado de México.
Los vendedores se cubrieron las espaldas y llamaron a lapolicía para inventar que los turistas habían llegado conpistolas a amenazarlos; luego de dar las características de launidad en la que viajaban los clientes, los uniformados montaron unoperativo y localizaron la unidad.
Después de las revisiones al interior del vehículo, no seubicó nada extraño o fuera de la ley; al lugar llegaron losacusados, quienes mostraron actitud agresiva. Por temor a algunarepresalia y porque debían regresar a su estado, los visitantesdecidieron no proceder en contra de los vendedores.
Cinco días después de que ocurrieran tales hechos, integrantesde la Comisión de Seguridad y Vigilancia del sitio ofrecierontomar cartas en el asunto y devolver su dinero o pertenencias a losque hayan sido agraviados. Además, puso en alerta a lasautoridades sobre la posible venta de droga por gente extraña allugar, misma que dijeron ya había sido detectada por loslocatarios; a la fecha siguen presentándose este tipo deactos.