Un fuerte estruendo y las llamas que alcanzaron los 20 metros de altura, fue lo que despertó a los habitantes de la colonia El Arenal, en el municipio de San Martín Texmelucan el 19 de diciembre de 2010, día en que una explosión por una toma clandestina dejó 30 personas calcinadas y 52 heridas.
Decenas de casas consumidas por el fuego, el sonido de las sirenas de bomberos, ambulancias y patrullas, y gente huyendo del lugar, fueron las escenas que quedaron en la memoria de los texmeluquenses, tras el estallido en los ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex).
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Fue alrededor de las 5:30 horas de aquel trágico día, cuando la calle 11 de Noviembre de dicha colonia se llenó de humo y fuego, lo que puso en alerta a los residentes, quienes solicitaron la ayuda de los cuerpos de emergencia de San Martín Texmelucan.
Con el paso de los minutos, el hidrocarburo se derramó en la corriente del río Atoyac, cercano al punto del estallido, por lo que la explosión se convirtió en un “río de fuego” que se extendió a más de un kilómetro.
Luego de casi tres horas, medios nacionales e internacionales que hicieron eco de la tragedia, informaron que al sitio acudieron brigadas de bomberos del Estado de México, Puebla, Tlaxcala y personal de Petróleos Mexicanos. A las 9:00 horas, los cuerpos de auxilio lograron controlar el siniestro y cerca de las 11 de la mañana sofocaron las llamas.
Pese a que se había controlado el incendio, detrás del humo se encontró un panorama devastador. Un total de 30 personas sin vida, 52 lesionados, 34 viviendas que se catalogaron como pérdida total, 140 casas con pérdida parcial, 72 vehículos calcinados, dos escuelas y dos puentes vehiculares dañados y parte del río Atoyac afectado, fue el saldo de la catástrofe.
Familias se fueron del municipio y del estado
Aquel día, los pobladores no dudaron en salvaguardar su integridad y salieron en pijama, con pantuflas y chanclas para poder escapar de las llamas.
Muchas familias se fueron del municipio y se refugiaron en localidades cercanas como Santa Rita Tlahuapan, San Salvador El Verde, Chiautzingo y Huejotzingo.
Debido al pánico que se generalizó entre la gente, hubo texmeluquenses que se fueron a la capital poblana y hasta a otros estados como Hidalgo, Tlaxcala y la Ciudad de México.
En total se desalojaron a 5 mil personas de las colonias La Purísima, El Arenal y San Isidro, pues se encontraban en un peligro latente.
¿Quiénes murieron?
Fueron 30 colonos de la zona quienes perdieron la vida derivada del siniestro ocasionado por el robo de combustible.
Los vecinos que perecieron fueron identificados como Erick, Jacinto, Cristian, Dana Ximena, Marina, Lorena, Jaime, Miriam, Israel, José Miguel, Aníbal, Mariano, Noemí Juney, Joshua Israel, Abigail Anahí, Leticia y Rosendo.
También en el listado se encontró a: María Concepción, Diego Ignacio, Elizabeth, Fernando, Antonio, Dulce Paola, Natziali Jocabeth, Brian Ariel, Martín, Sarahí Jiménez, Rocío, Cupertino y una persona que no fue identificada en ese momento.
Una de las personas lesionadas perdió a 10 miembros de su familia, entre ellos a su esposa.
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Pemex destinó millones de pesos para reparar el daño
Ante la explosión por una toma clandestina en los ductos de Pemex, la paraestatal informó que destinaría más de 200 millones de pesos en indemnizaciones y la reparación de los daños provocado por los “huachicoleros”.
Un año después, es decir, el 19 de diciembre de 2011, las autoridades develaron una placa con los nombres de las víctimas de la explosión. Esta fue colocada en la esquina de la calle 11 de Noviembre y Bulevar Xicoténcatl en la demarcación de San Martín Texmelucan.
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- Decenas de viviendas consumidas por el fuego, el sonido de las sirenas de bomberos, ambulancias y patrullas, y gente huyendo del lugar, fueron las escenas que quedaron en la memoria de los texmeluquenses
- 1 placa con los nombres de las víctimas de la explosión fue colocada en la esquina de la calle 11 de Noviembre y Bulevar Xicoténcatl
Perdió a su familia
- Una de las personas lesionadas perdió a 10 miembros de su familia, entre ellos a su esposa