Solo uno de los dos extranjeros detenidos por la balacera ocurrida la tarde del domingo en la colonia Francisco Villa fue puesto a disposición de un juez de control bajo cargos de lesiones calificadas producidas por proyectiles de arma de fuego. Tras calificarse de legal su detención, el juez de la causa ordenó el traslado del detenido al penal de San Miguel.
Fue el pasado 8 de septiembre cuando al 911 se alertó sobre un herido de bala en la avenida 16 de septiembre entre las calles 11 y 13 Oriente de la citada colonia.
Una vez en el lugar, policías y paramédicos confirmaron el reporte ciudadano, por lo que atendieron a un hombre de 40 años de edad, el cual fue herido por una bala perdida en la zona de las costillas. Después de recibir la atención prehospitalaria correspondiente, el vecino de la colonia Francisco Villa fue llevado a un nosocomio.
A la par, agentes policiacos detuvieron a dos sujetos Carlos N y Hines Tracy N, el primero con nacionalidad mexicana y estadounidense y el segundo solo con la nacionalidad norteamericana.
Su arresto según los reportes preliminares, obedeció a que ambos intentaron asaltar un negocio de comida, sin embargo, el dueño del inmueble que es rentado por una mujer, al percatarse de los hechos salió con pistola en mano para perseguir a los hampones, desatándose una balacera durante la cual una bala perdida hirió a un vecino del lugar.
No obstante, minutos después surgió una segunda versión de los hechos en la que se señaló que todo en realidad se trató de una riña entre los dos detenidos.
Inicialmente, los dos extranjeros fueron puestos a disposición del agente del Ministerio Público por el delito de homicidio en grado de tentativa y lesiones, sin embargo, la autoridad ministerial determinó que Hines Tracy no tuvo participación alguna en los hechos, mientras que en el caso de Carlos N, se estableció su presunta responsabilidad, siendo trasladado al Centro de Justicia Penal de Puebla pero por lesiones calificadas producidas por proyectiles de arma de fuego.
En audiencia, el juez de la causa calificó de legal la detención del imputado, ordenando que fuera transferido al penal de San Miguel bajo la medida cautelar de prisión preventiva oficiosa. Ante la resolución del togado, el detenido solicitó a través de su defensa la duplicidad del término constitucional de 144 horas para que sea en otra audiencia en la que se determine si quedará o no sujeto a investigación por este caso.