El cuerpo de la pequeña Joselyn N, de un año y once meses de nacida, ya fue entregado a sus padres la tarde de ayer con el fin de que le den cristiana sepultura, en tanto, la situación legal del chofer de la Ruta 45A, presunto culpable del accidente, hasta ayer, seguía sin resolverse.
No obstante, se espera que el caso sea judicializado para que sea ante un juez de control como se determine el estatus legal del imputado.
Fue la tarde del pasado lunes cuando Joselyn N, murió tras ser arrollada por una unidad de la Ruta 45 en la avenida Las Torres, a la altura de la calle orión en el municipio de San Andrés Cholula.
Ahí, la menor se encontraba junto con sus padres que pedían limosna a los automovilistas, como regularmente se le veía, a decir de testigos.
Sin embargo, la tarde del 30 de septiembre todo cambió ya que el chofer de la Ruta 45A, la pasó a traer entre las llantas de la unidad colectiva sin ni siquiera detenerse, incluso fue el padre de la pequeña quien corrió a rescatar el cuerpo de su hija.
Aunque al sitio acudieron técnicos en urgencias médicas, solo fue para confirmar el deceso de la menor, en tanto, agentes viales fueron los encargados de realizar el levantamiento de cadáver.
Pese a que el chofer la colectiva intentó darse a la fuga, este fue alcanzado y detenido para luego quedar a disposición del agente del Ministerio Público por el delito de homicidio culposo, sin embargo, jurídicamente, aún no se determina qué sucederá con él, ya que la ley también le otorga el beneficio de llegar a un medio alternativo de solución al derivarse todo de un hecho de tránsito.
Lo anterior, siempre y cuando la familia de la víctima esté de acuerdo, de lo contrario, el caso tendría que judicializarse.